Bruno Rodríguez Parrilla, miembro del Buró Político del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y ministro de Relaciones Exteriores, ratificó el apego irrestricto de la Isla al principio de «una sola China» y al reconocimiento de que Taiwán es parte inalienable del territorio de ese país, «tras la reciente provocación indignante del Parlamento Europeo».
En un mensaje en la red social X, el Canciller cubano llamó a esa instancia europea a respetar la resolución 2758 de 1971, de la Asamblea General de las Naciones Unidas, «que reconoció al Gobierno de la República Popular China como legítimo y único representante del pueblo chino».
Este sábado, la Misión de China ante la Unión Europea (UE) denunció que, pese a la fuerte oposición de su país, el Parlamento Europeo permitió que figuras de la «independencia de Taiwán» entraran en su edificio para asistir a un evento, y realizaran actividades separatistas.
La representación diplomática expresó que esta acción viola seriamente el principio de «una sola China», interfiere en los asuntos internos de la nación, y erosiona la confianza política mutua entre el gigante asiático y la UE.
Además, enfatizó que la cuestión de Taiwán se refiere a la soberanía y a la integridad territorial de China, y «es una línea roja que no debe ser cruzada».
La Misión subrayó que el principio de «una sola China» es un consenso universal de la comunidad internacional, así como la base de las relaciones diplomáticas entre el gigante asiático y la UE. En ese sentido, instó al bloque comunitario a no respaldar estos actos, no enviar señales erróneas a las fuerzas separatistas y preservar el panorama general de los vínculos bilaterales.



















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