ÓRGANO OFICIAL DEL COMITÉ CENTRAL DEL PARTIDO COMUNISTA DE CUBA

A veces, las dimensiones del vehículo, de la ignorancia y de la irresponsabilidad llevan a comportamientos humanos incompatibles con la libertad, por la peligrosidad de quienes proceden de manera desafiante y sin aparente control ante sus semejantes.

En Cárdenas, Matanzas, en un hecho repudiable ocurrido en mayo pasado, se mezclaron el irrespeto a las leyes del tránsito, la prepotencia, el desorden público, la agresión con arma blanca y con objeto contundente, así como impactos intencionales del auto conducido por el delincuente a un ómnibus y a varios autos, como si la furia del alcohol diera credenciales para atacar sin piedad a los demás.

El imputado, Yuni Valdés Pérez, chofer de una escatolina de la Sucursal Cubacar Varadero, ingiriendo bebidas alcohólicas, estacionó incorrectamente el vehículo e interrumpió la circulación de varios medios de transporte, incluido un ómnibus y varios autos.

Primero, desoyó, de manera irrespetuosa, los reclamos civilizados de los conductores y las personas que se le acercaron; luego, los agredió con una lata de cerveza e hirió en el rostro a uno de ellos, sacó un machete y los amenazó.

Todo ello, un espectáculo de desorden público rodeado de otras conductas reprochables de personas que, en lugar de intervenir para aplacar o detener al infractor, lo animaban a actuar por el camino de otros delitos.

En medio de la actuación violatoria y descontrolada de Valdés Pérez, el chofer del ómnibus que se encontraba detrás tomó el timón de su grúa, cogió impulso para chocar con toda la fuerza posible, y, repitiendo varias veces sus violentos choques, provocó daños a ese y a otros vehículos.

Aunque parecen escenas de filmes estadounidenses, lamentablemente, el protagonista es un delincuente de aquí, ahora en prisión.

A su conducta delictiva se suma la complicidad de quienes ingerían bebidas alcohólicas con él y no intervinieron para detener su agresividad, la pasividad de otros e, incluso, el coro irresponsable, cual circo romano, que lo invitaba a continuar.

Concluidas las investigaciones por los órganos del Ministerio del Interior, con el respeto a los derechos y garantías que consagran la Constitución y las leyes, la Fiscalía ha ejercido la acción penal pública ante la Sala de los Delitos contra la Seguridad del Estado, del Tribunal Provincial Popular de La Habana, que lo condenó a diez años de privación de libertad por el delito de Sabotaje, previsto en el Código Penal, en correspondencia con la lesividad de los hechos cometidos, las circunstancias en que ocurrieron y la conducta personal del imputado.

El combate al delito es una cuestión sagrada para los cubanos, que defendemos como una conquista de la Revolución, y es una de las fortalezas que hace de nuestro país un lugar y destino seguro, de tranquilidad y paz para nuestros ciudadanos y, especialmente, para nuestros hijos y nietos, que no nos perdonarán despreocuparnos, ni por un segundo, de este frente vital.

Continuaremos actuando en el marco de la legalidad, por la protección de los intereses del Estado y los derechos de todas las personas.

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Humberto Ruiz dijo:

1

19 de septiembre de 2025

05:03:30


No entiendo, "el chofer del ómnibus que se encontraba detrás tomo el timón de su grúa"...y el chofer no fue sancionado?? ?que cosa es una escatolina?? Y disculpen la ignorancia Gracias

William dijo:

2

19 de septiembre de 2025

07:59:45


Bueno que hayan publicado el nombre del delincuente. Faltó la foto para vergüenza pública, aunque seguro él no sabe qué es eso. En casos así el tribunal debería determinar que el delincuente no tiene derecho a salir de prisión hasta cumplir la totalidad de la condena, como se hace en otros países. Después le buscan un abogado y por buena conducta lo liberan a los tres años. Y él se reirá de la ley ,del pueblo y estado magnánimo.

Angel Sánchez dijo:

3

19 de septiembre de 2025

16:58:37


Los antisociales piensan que estar bajo los efectos del alcohol es atenuante. Todo lo contrario, es una agravante. Ese antisocial cometió varios delitos como lesiones, amenaza con arma blanca y daños de gran magnitud de manera deliberada y consciente. El cargo de sabotaje parece traído por los pelos. Todos los delitos cometidos por él daban para imponerle esa misma magnitud de pena.

Alberto Docampo Alvarez dijo:

4

19 de septiembre de 2025

21:56:30


Apoyo incondicional a esta medida del Tribunal Provincial de la Habana y repudio total a este hecho pero me cuesta trabajo entender que este ciudadano de pésima conducta social estuviese a cargo de una escatolina en nuestro sistema de turismo.

Ynot Lamb dijo:

5

22 de septiembre de 2025

06:14:42


Aquí se hace normal las guaperias ya, hemos actuado blandengue,y peor aún si consumen estupefacientes.Nuestra sociedad con mil defectos pero aún prevalencia de virtudes que otras sociedades envidian.Sumale los malos y agresivos pensamientos de los que incitan al delito atentado contra los demás incluido las autoridades.Vemos la moda en las Redes sociales la incitación al odio y al desorden.Ponganse fuerte los proceso judiciales contra acciones de terror y criminalidad.