Un cubano en la redacción

Acostumbrado a ser noticia, tanto así que se considera muy cercano a los periodistas y su oficio, el general de Brigada Arnaldo Tamayo Méndez, primer cubano en viajar al espacio, no se encarga de poner distancias con su audiencia y mucho menos de dosificar preguntas: muy por el contrario, las estimula, sabedor ya, eso sí, de por dónde se mueve la curiosidad en lo que respecta a sus vivencias.

Por eso, su reciente diálogo con trabajadores del periódico Granma –como parte del programa de actividades con el cual la editora celebra su aniversario 60– fue esencialmente una conversación marcada por la cercanía.

Si de estas páginas tomó la idea para el título de uno de sus libros, Un cubano en el cosmos, lo que ocurrió esta vez fue la visita de un cubano a la redacción, con la sencillez y el manejo proverbial del humor que caracteriza a muchos de los nacidos en la Isla.

Salieron a relucir en el conversatorio anécdotas del especial apoyo e interés de Fidel y Raúl por su viaje al cosmos en un vuelo conjunto cubano-soviético, en 1980, del cual se cumplirán en unos días 45 años. También, sobre la rigurosa preparación que antecedió a su vuelo a bordo de la Soyuz 38, los efectos físicos de permanecer en el espacio exterior, y los experimentos científicos realizados en la estación Saliut 6.

Asimismo, el Héroe de la República de Cuba y de la Unión Soviética, habló sobre las complejidades de ser piloto de combate, el papel de la familia y el cariño que el pueblo de Cuba, en especial niñas y niños, le ha brindado siempre.