Desde que hace cinco años se constituyó el Grupo Agrícola (GAG) del Ministerio de la Agricultura (Minag), ha sido una política de ese ente priorizar el desarrollo de todo su sistema empresarial, con la creación de empresas agroindustriales, que permitan cerrar el ciclo productivo con el máximo valor agregado posible a los productos agropecuarios.
Así comentó en un encuentro con la prensa Leonardo Martínez López, director de Industrias y Mercadotecnia del GAG, sobre el antecedente que le dio vida a las 200 instalaciones de procesamiento de frutas y vegetales, granos, carnes y de otros productos, existentes hoy en el país.
De ese total, las 120 minindustrias que procesan frutas y vegetales, informó el directivo del GAG, en la presente campaña de primavera ya han terminado el procesamiento de 1 387 toneladas de tomate, mientras, es tiempo de la industrialización del mango, la piña y la guayaba, que continuaba en el mes de mayo y debe culminar en septiembre, explicó.
Con una capacidad de procesamiento de 35 000 toneladas al año, que representan el 18 % de la capacidad agroindustrial instalada en el GAG, estas minindustrias se centran en abastecer el mercado local con mermeladas, jugos, dulces en almíbar de fruta bomba, coco, guayaba, toronja, aderezos, mojitos, especias y condimentos entre otros.
A partir del modelo de gestión e integración desarrollado por la Empresa Agroindustrial Ceballos entre la industria y las 21 minindustrias pertenecientes a sus cooperativas agropecuarias, a las unidades empresariales de base (UEB), proyectos de colaboración y demás tenentes, se han logrado resultados positivos que se extienden al resto de los Polos Agroindustriales, subrayó.
Ceballos, destacó Martínez López, cuenta no solo con el potencial agrícola, sino también con una poderosa industria, a la cual se le han inyectado 21 millones de dólares para su desarrollo. Además, la mayoría de las minindustrias anexas están certificadas por su inocuidad y las buenas prácticas de producción, al tiempo que utilizan a la industria que las agrupa en servicios de laboratorio, de marca y de comercialización.
Por eso, reiteró, hemos estado avanzando, hasta donde ha sido posible, para que otras empresas importantes, como es la Victoria de Girón, de Jagüey Grande, en la provincia de Matanzas también cuenten con ese modelo de producción. Se ha intencionado dotar a las grandes industrias de otras pequeñas, aunque la meta no se ha completado, tanto por factores objetivos como subjetivos, afirmó.
No obstante, el propósito es lograr un mejor aprovechamiento de las capacidades disponibles, así como los servicios de mantenimiento, metrología, laboratorio de procesos y certificación de la calidad e inocuidad, de uso de marcas, de acceso a todos los mercados existentes dentro y fuera del país.
Otro de los retos en los que se trabaja, señaló el Director de Industrias y Mercadotecnia del GAG, es en la adquisición de tecnologías que permitan usar la mayor diversidad de envases disponibles, tanto nacionales como extranjeros. En el caso de las pequeñas industrias, de conjunto con la industria alimentaria, hemos introducido de manera masiva, por ejemplo, la botella de cristal, puntualizó.
A pesar de las muchas dificultades que persisten y de las metas que faltan por concretar, reconoció el directivo, las minindustrias se prueban en el contexto como un eslabón fundamental para mantener el equilibrio agroindustrial de cualquier sistema productivo; porque son capaces de procesar las pequeñas cantidades que una gran industria no puede permitirse, y de contar con la labor manual para sacar el máximo provecho a la materia prima disponible.



















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Alex dijo:
1
2 de junio de 2021
08:40:57
Yasser dijo:
2
2 de junio de 2021
21:10:20
Ccg dijo:
3
3 de junio de 2021
11:38:51
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