ÓRGANO OFICIAL DEL COMITÉ CENTRAL DEL PARTIDO COMUNISTA DE CUBA
Irenaldo Delgado Mora, director de la Etica Centro, destaca la labor de esa entidad científica con el objetivo de poder contar con bancos de semillas de plantas proteicas. Foto: del autor

Villa Clara.–La mentalidad importadora que ha primado en los últimos años, que acostumbró a recibir, como decimos en buen cubano, «por la canalita», el alimento animal necesario para fomentar la producción ganadera y porcina en Cuba, ha influido en que no haya prosperado en el país, con la celeridad requerida, el programa de fomento de plantas proteicas.

Diseñada por Fidel hace casi una década, la propuesta incluye varios proyectos: uno dedicado a la Moringa como suplemento nutricional humano, otro dirigido a la producción de semilla agámica y botánica de las plantas proteicas; un tercero orientado a la producción de pastos y forrajes para la alimentación animal, y el último destinado a la obtención de pienso a base de esas plantas para a animales monogástricos y poligástricos.

Una mirada al tema en Villa Clara, demuestra lo mucho que falta por hacer en un asunto que ha demostrado su elevada efectividad, como alternativa para incrementar el suministro de proteínas a los animales, más ahora, cuando arrecian las dificultades internas para obtener las materias primas que permitan fabricar piensos, en medio de un contexto de crisis internacional al que se le suma la política de asfixia de Estados Unidos contra Cuba con su sostenido bloqueo y persecución financiera.

Unas veces por la falta de voluntad y de sistematicidad de algunos para emprender la tarea, otras por el desconocimiento o la carencia de las simientes necesarias, y también por las trabas burocráticas, que impiden la entrega oportuna de las tierras ociosas a los productores, se revelan como las principales causas del lento avance que muestra el programa en el territorio.

Así, por ejemplo, si en lo que va de año estaba previsto sembrar 425,8 hectáreas, la realidad muestra que solo se han plantado 223,5, es decir, poco más de la mitad, según la explicación brindada por Fausto Vega Herrera, ­especialista en agrotecnia al frente de la tarea en la Delegación Provincial de la Agricultura.

«La carencia de combustible en buena parte del año y las intensas lluvias de los últimos meses han impedido sembrar las cifras que estaban previstas», precisa Vega Herrera, quien puntualiza, que entidades de Corralillo y Macún, donde estaban previstas las mayores siembras, apenas avanzaron, por las razones anteriormente señaladas.

Comenta que en Villa Clara, como en todo el país, ha sido un problema contar con la cantidad de semilla necesaria para este empeño, sobre todo de moringa y morera, simientes que podrán tener, en alguna cuantía, a partir de noviembre. Reconoce, de igual manera, que las plantaciones deben fomentarse en dependencia del tipo de suelo.

Respecto a las entidades que más avanzan en la siembra de plantas proteicas, menciona a La Vitrina, en Manicaragua, que tiene plantadas 200 hectáreas, mientras en el resto de las entidades ganaderas y porcinas las cifras resultan irrisorias.

Tal panorama también influye en la crítica situación de la ganadería en el territorio, que muestra una baja tasa de natalidad y una alta mortalidad vacuna a causa de la falta de agua y de alimentos, además del incumplimiento en la entrega de leche a la industria, todo lo cual quizá hubiera sido diferente si el programa de plantas proteicas hubiera prendido en la última década.

APORTE DE LA CIENCIA

Si bien se reconoce que los alimentos tradicionales, a partir del maíz y de la soya, hacen que los animales crezcan más ­rápido, lo cierto es que también las plantas proteicas como la Moringa, la Morera, la Tithonia y la Cratylia, por el alto valor nutricional de sus follajes, también pueden contribuir a sostener la producción ganadera y porcina en Cuba.

En contextos como el que vive nuestro país en la actualidad, resulta insostenible continuar gastando más de 800 millones de dólares en la compra de trigo, soya y maíz, destinados a la alimentación animal, de ahí la importancia de incentivar programas como el de las plantas proteicas que hoy encabeza la Entidad de Ciencia, Tecnología e Innovación (Ecti) Sierra Maestra, subordinada al Consejo de Ministros.

En ese sentido, es vital el aporte de la ciencia al logro de este objetivo en el plazo más corto posible, de ahí el esfuerzo que hoy realizan instituciones científicas como la Estación de Pastos y Forrajes Indio Hatuey, el Instituto de Ciencia Animal (ICA), el Centro Nacional para la Producción de Animales de Laboratorio (Cenpalab) y la Estación Territorial de Investigaciones de la Caña de Azúcar (Etica Centro Villa Clara), entre otras instituciones.

Al respecto, el máster en Ciencias Irenaldo Delgado Mora, director de la Etica Centro, entidad ubicada en el municipio de Ranchuelo, destaca que con el objetivo de poder contar con bancos de semillas para la venta de material de plantación a los productores, hoy desarrollan en ese centro varios protocolos de propagación vía estacas y plantas in vitro de tres especies de variedades proteicas (Morera, Cratylia y Tithonia).

Refiere que en el trabajo desarrollado han podido contar con el apoyo de varias  instituciones, también vinculadas a este propósito, las que les han suministrado cultivos de Morera, semillas ­botánicas de la accesión de Cratylia y tallos de la especie Tithonia, material utilizado para la obtención allí de un banco de plantas madres cultivadas en condiciones semicontroladas.

Según el especialista, en el caso específico de la Morera, se desarrolló una metodología autóctona para la propagación por estacas de dos de los cultivos de esta especie, alcanzándose altos porcentajes de brotación y enraizamiento, a partir de lo cual se establecerá un vivero para el incremento del material base a un total de 5 000 plantas madres.

«Contar con ello hará posible la producción cada tres meses de 40 000 nuevas plantas», refiere Irenaldo Delgado Mora, quien añade que también se pone a punto un protocolo para la propagación in vitro de ambos cultivos.

A fin de facilitar la siembra de plantas proteicas, la Etica Centro Villa Clara tiene entre sus propósitos entregar el próximo año unas 200 000 posturas de estas especies a los Bancos de Semillas Registrados (BSR), pertenecientes a la Empresa Azucarera de la provincia.

Junto al estudio de la Morera, allí también se trabaja con la especie Cratylia, la cual tiene una baja capacidad de germinación de las semillas a partir de los 15 días de colectadas, de ahí la importancia de desarrollar protocolos o metodologías alternativas como la propagación in vitro, que alcanza un 100 % de germinación, reconoce el director.

Además de la Etica Centro, la Universidad Central «Marta Abreu» de Las Villas, y su facultad de Ciencias Agropecuarias, también trabaja en varios proyectos científicos encaminados a garantizar la alimentación animal mediante el empleo de plantas proteicas.

Indicaciones del Presidente

El Presidente Miguel Díaz-Canel Bermúdez ha hecho énfasis en la generalización del uso de las plantas proteicas, pues «necesitamos que en todos los territorios se siga insistiendo en el desarrollo de estas plantaciones, pues ello nos permitirá, entre otros beneficios, disponer de alimento animal, sobre la base de su uso como forraje, y de materias primas para la elaboración de los piensos cubanos».

Valoró que, aun cuando soluciones como estas no resuelvan el problema en su totalidad, constituyen un complemento importante, que ha demostrado en más de una ocasión sus potencialidades.

También ha orientado la necesidad de extender el programa Sierra Maestra, cuya finalidad es obtener leche y carne solo con forraje y plantas proteicas, a una mayor cantidad de áreas en la Mayor de las Antillas.

En particular, sobre este programa, insistió en que se deben tener en cuenta los beneficios de las plantas proteicas como alimento animal, probados ya en disímiles escenarios y que constituyen alternativas que ofrecen respuestas, pero «tiene que haber un plan concreto de siembra de las áreas, de mantenimiento y uso de cada una de ellas».

 

COMENTAR
  • Mostrar respeto a los criterios en sus comentarios.

  • No ofender, ni usar frases vulgares y/o palabras obscenas.

  • Nos reservaremos el derecho de moderar aquellos comentarios que no cumplan con las reglas de uso.