ESMERALDA, Camagüey. —Incrédulos y optimistas, vacilantes y batalladores, todos los que de una forma u otra tuvieron que ver con la gigantesca inversión, no pudieron eludir lo emotivo del momento: tras seis años de total inactividad, el Central Brasil echó a andar sus máquinas en una primera prueba antes de la arrancada oficial prevista para el 15 de diciembre próximo.
Junto a los azucareros esmeraldenses y a los ejecutores de la obra, compartieron la jornada de comprobación Jorge Luis Tapia Fonseca, primer secretario del Comité Provincial del Partido, e Isabel González Cárdenas, presidenta de la Asamblea del Poder Popular a esa instancia, quienes apreciaron el ambiente general de trabajo en cada una de las áreas del nonagenario ingenio.
Ambos dirigentes sostuvieron, además, un encuentro con administradores de las 13 unidades productoras de caña de la localidad, en el que de manera crítica se analizó la responsabilidad que tienen de crecer en área y en rendimientos agrícolas para responder a la demanda del coloso industrial, a medida que incremente su capacidad de molida.
Durante la verificación, efectuada por especialistas de la Empresa Azucarera Camagüey, se detectaron detalles técnicos que es preciso corregir en los días que restan hasta la comprobación final, programada para el 20 de noviembre, en que el Central Brasil deberá proclamarse listo para iniciar la zafra 2014-2015 en la zona norte del territorio agramontino.
De concretarse tal aspiración, será esta la quinta industria en operaciones, además del Batalla de Las Guásimas, Siboney, Argentina y Carlos Manuel de Céspedes, para cumplir el plan de producción de azúcar de la provincia, que prevé un crecimiento del 25 % respecto a la contienda anterior, acompañado también por favorables índices de eficiencia industrial.
Erduin Luis Delgado, director industrial de la Empresa Azucarera Camagüey, explicó que se trata de un ingenio prácticamente nuevo, al que por un monto de unos 34 millones de pesos se le hicieron reparaciones capitales y grandes modificaciones tecnológicas en los sistemas eléctricos, mecánicos y automáticos para devolverle el vigor de antaño.
“El Brasil ya no es una expectativa, sino una grata realidad que incidirá en la reanimación económica del Batey Jaronú y el bienestar de su gente”, aseguró Fidel Rivero Delgado, director de la fábrica, quien ratificó que el colectivo trabajará para hacer una primera zafra que se distinga por la organización, la disciplina y el estricto cumplimiento de los indicadores de eficiencia.
En 135 días planificados de molida, el ingenio esmeraldense deberá producir 37 530 toneladas de azúcar y será el único en Camagüey en elaborar 23 538 toneladas de miel B, para junto al Batalla de Las Guásimas, de Vertientes, asumir el 54 % del compromiso productivo provincial.



















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Rogelio dijo:
21
28 de octubre de 2014
13:07:00
carmelo dijo:
22
27 de abril de 2015
12:17:30
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