Millones contra la agresión
Mientras el poderío
militar de Estados Unidos asesina al pueblo iraquí, millones de
personas en el mundo expresaron su indignación, pidieron el cese de
la agresión y reclamaron la paz mundial y el derecho de cada país
a escoger su propio camino.
La policía norteamericana tiene mucho trabajo arrestando a jóvenes manifestantes.
Las agencias noticiosas
destacaron como las más numerosas protestas las realizadas en
Indonesia, Paquistán, Marruecos, la India, Bulgaria y España.
En Jakarta, la capital
de Indonesia, más de un millón de personas se congregaron frente a
las embajadas de Estados Unidos y Gran Bretaña, así como ante la
oficina de Naciones Unidas, en tanto los oradores exigían que el
presidente norteamericano, George W. Bush, sea llevado ante un
tribunal internacional para ser juzgado por crímenes contra la
humanidad. En tanto, la presidenta Megawati Sukarnoputri criticó
duramente la agresión y llamó al Consejo de Seguridad y a la
Asamblea General de la ONU a detenerla.
Mientras, en la ciudad
paquistaní de Peshawar, 250 000 manifestantes cortaron durante dos
horas la autopista que une la localidad con Islamabad, corearon
consignas antinorteamericanas y quemaron efigies de Bush y del
primer ministro británico, Anthony Blair.
Apunta ANSA que por lo
menos un millón de personas se manifestaron en territorio
paquistaní, las cuales, además de Peshawar, lo hicieron en las
ciudades de Karachi, Hyderabad, Sukkur, Lahore, Multan, Faisalabad y
Quetta.
Unos 300 000 marroquíes
acusaron a la Liga Árabe de no hacer nada para parar la agresión y
quemaron banderas de Estados Unidos.
Los búlgaros se unen
al resto del mundo.
Mientras tanto, cientos
de miles de personas salieron a las calles de Sofía, la capital de
Bulgaria, para protestar contra el conflicto bélico iniciado por
Estados Unidos y sus aliados en Iraq, y exigieron la dimisión del
primer ministro búlgaro, Simeón Sackskoburggotski, quien ha
respaldado las tesis de Washington.
En Calcuta, más de 150
000 habitantes de esa ciudad del estado de Bengala Occidental
quemaron imágenes de Bush, en la más importante manifestación
antibélica de la India, desde que comenzó la invasión a Iraq.
En España, más de 100
000 personas desafiaron la lluvia y el viento que afecta a casi toda
la península, para tomar parte en marchas de protesta que llegaron
a las bases militares de todo el país. Unos 20 000 manifestantes
participaron en la del enclave militar de Rota, en Cádiz, que
utilizan conjuntamente las fuerzas españolas y las estadounidenses.
La lluvia no detuvo
a los españoles.
Hubo protestas similares
ante la base madrileña de Torrejón de Ardoz y las de Zaragoza,
Albacete, Valencia y Murcia. En el centro de Barcelona, miles de
manifestantes contrarios a la agresión inflaron y explotaron unos
50 000 globos negros, simulando los bombardeos en Iraq.
En Corea del Sur, unos
50 000 pacifistas se concentraron en un parque de Seúl para
protestar contra la invasión a Iraq.
Ante la base militar
británica de Akrotiri, en Chipre, 5 000 chipriotas hicieron ondear
banderas iraquíes y lanzaron piedras y huevos.
Miles de libaneses y
palestinos se manifestaron en Beit Jbeil y otros lugares del Líbano
contra la agresión, y, en Egipto, unos 15 000 universitarios
quemaron banderas norteamericanas y británicas en Alejandría.
En China se produjeron
dos manifestaciones en Beijing, la capital, una de ellas
protagonizada por residentes extranjeros frente a la embajada
estadounidense, y la otra en una universidad.
Las bases norteamericanas
en España, como aquí en Rota, son escenarios de fuertes protestas.
Frenemos la guerra,
manifiesta el enorme panel realizado por estudiantes de la Academia
de Bellas Artes de Salónica, que este domingo fue transportado a la
cima del Olimpo, el monte de los 12 dioses de la antigua Grecia.
También en Grecia, pero
en Creta, miles de personas acudieron al llamado del Partido
Comunista para pedir el cierre de la base aeronaval de Suda, donde
se abastecen naves norteamericanas que intervienen en la agresión a
Iraq.
EN AMÉRICA LATINA
En Chile, más de 45 000
personas acudieron hasta el Estadio Nacional de Santiago para el
recital del grupo de rock Los Prisioneros, cuya característica fue
la arenga contra Bush y la agresión de Estados Unidos a Iraq.
También en la capital
chilena, 3 500 personas condenaron a Estados Unidos y vertieron
anilina roja en una fuente en la Plaza de la Constitución, para
simbolizar la sangre derramada en Iraq.
Un rotundo No a la
agresión del 82,2% de los entrevistados fue el resultado de la
encuesta realizada en Nicaragua por la firma Demoscopia y El Nuevo
Diario. Tanto en Managua como en otras ciudades del interior los
grupos antibelicistas y del Movimiento por la Paz mantienen las
protestas contra la invasión al país árabe.
Un 60% de los
costarricenses se pronunció en una encuesta contra el apoyo del
Gobierno de San José a la agresión militar, en tanto opositores a
la guerra distribuyeron volantes en el capitalino Parque Central, en
los que se subrayaba el repudio a la posición oficial.
Los brasileños aprovechan
cualquier vía para expresar
el rechazo a la guerra.
Dos comités directivos
de la guerrilla del Ejército Popular Revolucionario (EPR), en el
estado de Oaxaca, pidieron a los mexicanos una lucha unitaria contra
la agresión de Washington y sus aliados a Iraq, y denunció que la
operación militar norteamericana tiene como único objetivo
controlar el petróleo iraquí.
En Tegucigalpa, miles de
hondureños se manifestaron frente a las embajadas de España y
Estados Unidos.
En República
Dominicana, la policía detuvo con gases lacrimógenos una marcha
pacifista que intentó llegar a la embajada de Estados Unidos para
entregar una declaración de condena al ataque a Iraq.
En Caracas, decenas de
personas se congregaron en el centro de la ciudad y lanzaron globos
blancos como emblemas de paz.
El candidato
presidencial argentino, Néstor Kirchner, advirtió que Estados
Unidos invadió a Iraq por el petróleo "y mañana pueden ser
las reservas de agua dulce de La Patagonia". Decenas de
manifestantes partieron del capitalino Parque de la Independencia,
conver-tido desde el inicio de la agresión en centro de protesta
contra la guerra.
|