WASHINGTON, 28 de marzo (PL). —
Frenado su avance hacia Bagdad por la resistencia de los defensores
iraquíes, y con un creciente número de bajas entre sus tropas
agresoras, Estados Unidos decidió hoy enviar a otros 120 000
efectivos hacia el Golfo Pérsico.
De acuerdo con el influyente diario
The Washington Post, la prolongación de la guerra y el aumento en
el número de bajas norteamericanas podrían comenzar a erosionar el
apoyo a la operación bélica dentro de Estados Unidos.
Según la publicación, en Iraq han
muerto más soldados norteamericanos que en ningún otro lugar desde
que Washington lanzó su cruzada unilateral contra el terrorismo, a
raíz de los ataques del 11 de septiembre de 2001.
En Afganistán, nación asiática
invadida el año pasado por supuestamente servir de abrigo a la
organización islámica Al Qaeda, murieron en combate 20 militares
estadounidenses, indica el Post.
En este contexto, según estimados de
la agencia de noticias AP en un despacho desde Qatar y voceros del
Pentágono en el hospital en Ramstein, Alemania, hasta hoy 191
militares norteamericanos figuran como bajas en la injustificada
agresión a Iraq.
Según las cifras contabilizadas
desde esas fuentes, de esas bajas, 48 resultaron muertos, 108
heridos, 28 desaparecidos y siete prisioneros.
El Post recuerda además que en la
llamada Guerra del Golfo de hace 12 años, el Pentágono reportó
147 bajas en las seis semanas que duró el ataque contra Iraq.
Del otro lado, la cadena de
televisión CNN, que cita a fuentes del Departamento de Defensa
norteamericano, comunica que otros 120 000 soldados adicionales
se sumarán en los próximos días a los cerca de 260 000
efectivos desplegados en la región del Golfo Pérsico.
Nueve días después de iniciada la
invasión anglo-norteamericana al país árabe, la resistencia
ofrecida por los iraquíes ha dado al traste con los planes de los
agresores de tomar rápidamente Bagdad y derrocar al presidente
Saddam Hussein.
La víspera, el mandatario
estadounidense, George W. Bush, advirtió que la guerra durará lo
que tome ganarla, mientras que el secretario de Defensa, Donald
Rumsfeld, dijo en otra conferencia de prensa que el conflicto esta
más cerca del principio que del fin.