BAGDAD, 4 de abril (PL). — La
situación continuaba confusa esta tarde aquí respecto al control
del aeropuerto internacional Saddam, que el ejército norteamericano
afirmó haber ocupado en sus ataques contra la resistencia iraquí.
Aunque en un comunicado presidencial
difundido este viernes se aceptó que los invasores están
combatiendo para ocupar esta capital, no se establecieron
precisiones sobre los combates en un lugar estratégico como es la
terminal aérea.
Versiones procedentes de medios
occidentales se refirieron a que esa instalación fue ocupada por
los atacantes, quienes mataron a centenares de iraquíes, pero luego
no pudieron confirmar la veracidad de las informaciones.
Hasta el propio ministro de Defensa
británico, Geoff Hoon, debió limitarse a puntualizar "que yo
sepa, aún se está combatiendo", aunque antes había declarado
que una parte del aeropuerto resultó tomada por los soldados
norteamericanos.
Reporteros que se encuentran cerca
del aeropuerto notificaron que se realizan violentos combates en los
alrededores; tales choques generaron un masivo éxodo de la
población civil.
En balances preliminares se anotó
que miles de ciudadanos de Al Furat, un barrio en los alrededores de
la terminal aérea, a unos 20 kilómetros al suroeste del centro de
esta urbe, tratan de escapar del fuego cruzado.
Según las fuentes castrenses de
Washington, los soldados norteamericanos ocuparon las dependencias
del aeropuerto dedicadas a atender a las personalidades oficiales y
allí capturaron a 40 iraquíes.
Sin embargo, otras fuentes se remiten
a que los enfrentamientos entre las tropas del eje
anglonorteamericano y la Guardia Republicana de Iraq tienen lugar en
las propias pistas de la terminal.
Más de mil militares estadounidenses
asaltaron el recinto, mientras que aviones F-15e y F-18 dispararon
bombas para apoyar la operación.
Se presume que varios de esos
explosivos pudieron impactar a las viviendas civiles cercanas al
lugar, con la correspondiente cantidad de víctimas.
Al cierre de la mañana, hora local,
se indicó que efectivos del ejército iraquí lanzaron una
contraofensiva en el aeropuerto Saddam, con resultados que aún se
desconocen.
Bajo el fuerte cañoneo los
presumibles miembros de la Guardia Republicana, fuerza élite,
marcharon contra el enemigo, y se añadió que esos soldados
iraquíes controlan la carretera que une a la terminal internacional
con esta urbe.