BAGDAD, 2 de abril — Los bombardeos
de la aviación anglo-norteamericana dejaron, solo anoche, 24
civiles muertos y 268 heridos en Bagdad y seis provincias sureñas,
denunció hoy Mohammed Said Al Sahaf, ministro iraquí de Información.
En su habitual rueda de prensa, desde
que comenzó la agresión militar el 20 de marzo, Al Sahaf precisó
que en esta capital esos ataques registraron 10 muertos y 90
heridos.
Las restantes víctimas tuvieron
lugar en Ninive, Ambar, Babilonia y Salah Eddin, en el sur, que
sumaron 14 muertos y 178 lesionados por las bombas dirigidas y los
misiles cruceros Tomahawk.
Sin embargo, al parecer el Ministro
aún no disponía de las víctimas del miércoles en la mañana
cuando los aviones del eje Washington-Londres atacaron un hospital
materno de la Media Luna Roja en esta capital, la feria comercial y
otros edificios civiles.
De acuerdo con la cadena televisiva
qatarí Al Jazzera esos indiscriminados bombardeos dejaron varios
muertos y al menos 25 heridos, incluidos pacientes, médicos y
enfermeras.
Los ataques sorprendieron a
automovilistas que resultaron impactados por los misiles y cinco de
ellos murieron carbonizados dentro de los vehículos.
Por su parte, la cadena televisiva
árabe Al Arabiya reportó que en los bombardeos de lunes y martes
últimos sobre la ciudad de Al Hill, en la provincia de Babilonia,
se contabilizaron decenas de muertos civiles y 450 heridos.
En correspondencia con esa información,
Roland Huguenin Benjamin, portavoz de la Cruz Roja Internacional en
Bagdad, señaló que esos ataques resultaron un "verdadero
horror dado que las víctimas son todas civiles, entre ellas mujeres
y niños".
Huguenin Benjamin, quien visitó el
bombardeado hospital universitario de la ciudad Al Hill, reiteró
que las víctimas eran "mujeres y niños, agricultores ajenos
al conflicto" y calificó lo que vio de "un verdadero
horror. Había decenas de cuerpos despedazados".
En otra parte de sus declaraciones,
Al Sahaf desmintió que las tropas agresoras
atravesaran el río Tigris y abrieran una brecha en las defensas
iraquíes en la ciudad de Kerbala, unos 80 kilómetros, y en la de
Nayaf, unos 150 kilómetros al sur de Bagdad, como difunde la cadena
televisiva CNN.
El ministro de Información afirmó
que había hablado con el gobernador de Kerbala esta misma mañana,
quien reconoció que en ese momento tenía lugar "una feroz
batalla" en esa localidad.
Entre Basora y Kerbala —aseguró— los
iraquíes derribaron dos helicópteros Apache y destruyeron un gran
número de tanques y de vehículos militares.
Al Sahaf acusó a los atacantes de
intentar causar daños en los santuarios chiítas del sur de Iraq, y
citó en particular las tumbas de Ali, Husein y Al Abbas, las tres
más veneradas por esa etnia.
Por ultimo, el Ministro iraquí
aseguró que los agresores arrojan desde sus aviones
bolígrafos-bomba con la intención de matar niños, por lo que su
gobierno advirtió a la población que los mismos no deben
recogerse. (PL)