21
de Junio del 2003
Se fortalece la lucha por la liberación de los Cinco Patriotas
Lourdes
Pérez Navarro
Dos
años después de que en Granma fuera publicado el mensaje al
pueblo norteamericano, y toda Cuba conociera la verdadera identidad
de Gerardo, Ramón, Fernando, René y Antonio, hechos que dieron
paso a la primera Mesa Redonda sobre este tema y al inicio de la
batalla del pueblo por exigir que se haga justicia con los Cinco
Patriotas Prisioneros Políticos del imperio la lucha por su
liberación se extiende por el planeta.
La solidaridad aumenta,
y algunos medios informativos de países latinoamericanos, europeos
y de los propios Estados Unidos, destacan lo amañado del juicio en
que injustamente han sido condenados Cinco Cubanos decididos a
luchar contra el terrorismo desde suelo norteamericano.
Así ocurrió
recientemente al publicarse en un periódico del estado de Colorado
(EE.UU.) —lugar donde se encuentra prisionero Antonio Guerrero—,
un artículo investigativo, extenso y bien documentado, acerca del
proceso que se sigue contra nuestros hermanos patriotas.
Los panelistas
destacaron además, que a pesar de haber transcurrido dos años
desde que fueron condenados los Cinco Patriotas, contra ellos y sus
familiares continúan cometiéndose injustos crímenes, denunciados
por la Unión Nacional de Juristas de Cuba y las Sociedades Cubanas
de Derecho Civil y Familia, y la Penal.
Recientemente les fueron
negados nuevamente los permisos de visita a la esposa de Gerardo y a
la pequeña hija de René, acciones que constituyen violaciones
legales dispuestas en la propia Constitución norteamericana, en la
Convención contra la Tortura, en la Carta de la Organización de
Naciones Unidas y en la Declaración de los Derechos Humanos.
El hecho de prohibirles
a los prisioneros el contacto y comunicación con sus familiares es
un castigo adicional, una forma de tortura psicológica que
contradice el sentido de las mencionadas legislaciones.
Los funcionarios que
adoptan el castigo como vía de sufrimiento innecesario a los
reclusos, o excesos en los métodos disciplinarios, son delincuentes
merecedores de las más severas sanciones, como dispone la
Convención Interamericana para prevenir y sancionar la tortura,
adoptada en el seno de la Organización de Estados Americanos en
1985.
Adriana, la esposa de
Gerardo Hernández, refleja estas razones en reciente escrito que
recorre las vías de Internet: La negación de visa de forma
reiterada, dice, nos obliga a un distanciamiento mayor, a sufrir las
constantes violaciones de los derechos humanos y de leyes
internacionales, aumentando así la ansiedad y el perpetuo castigo
de no vernos.
Intervinieron en esta
Mesa Redonda, como panelistas Reinaldo Taladrid, Rogelio Polanco,
Lázaro Barredo, el doctor Rodolfo Dávalos, profesor titular de la
Facultad de Derecho de la Universidad de La Habana; Aixa Hevia, bajo
la conducción de Randy Alonso.
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