19 de Enero de 2002 Fortaleza de gigantes
ORFILIO PELAEZ
Para la Patria nos levantamos, dijo
José Martí en vísperas del inicio de la Guerra Necesaria. Y nuestros cinco héroes,
desde la lejanía de su encierro en las prisiones del imperio, también se han levantado
por la Patria ahora y para todos los tiempos.
Con esta reflexión culminó el
moderador Randy Alonso la Mesa Redonda Informativa del viernes En las entrañas del
monstruo, donde un panel integrado por el doctor Rodolfo Dávalos, profesor titular de
la Facultad de Derecho de la Universidad de La Habana, y los periodistas Lázaro Barredo,
Reinaldo Taladrid, Rogelio Polanco y Arleen Rodríguez, abordó nuevos detalles del
amañado juicio seguido contra nuestros compatriotas, y las cada vez más creciente
muestras de solidaridad de los cubanos y de numerosas personas en el mundo hacia su causa.
Al comentar la transcripción oficial
de la vista de sentencia contra Gerardo Hernández, cuyo texto íntegro de 201 páginas
acaba de recibirse, el profesor Rodolfo Dávalos señaló que en buena parte del documento
se ponen de manifiesto los propósitos de la fiscalía de fundamentar el cargo de
conspiración para cometer espionaje con el supuesto acceso de nuestro héroe a
información altamente secreta, vinculada con la defensa de Estados Unidos.
Durante el juicio, subrayó el
jurista, la defensa refutó de manera diáfana tal acusación y puso a los acusadores en
aprietos cuando pidió que definieran si los datos recopilados por Gerardo dañaban o no
la seguridad del país norteño, algo que por supuesto fueron incapaces de probar.
Según manifestó Dávalos, también
resultó llamativo el orden de intervenciones seguido en el proceso. Normalmente, acotó,
la vista suele finalizar con el alegato del acusado. Sin embargo, en el caso de Gerardo,
cuando este terminó de hablar, la jueza enseguida le concedió la palabra a los
familiares de los pilotos de Hermanos al Rescate involucrados en los sucesos del 24 de
febrero de 1996, y al final la sesión concluyó con otra intervención de la fiscal.
Este procedimiento inusual demuestra
el carácter político del juicio y cómo la mafia de Miami transformó el proceso en una
verdadera vendetta contra la Revolución Cubana, precisó.
Por su parte, Rogelio Polanco,
director de Juventud Rebelde, comentó el insolente artículo publicado la pasada semana
por el terrorista José Basulto en el libelo de la mafia, donde sin el más mínimo
respeto por la ley, el siniestro personaje arremete contra la integridad de los abogados
que defendieron a nuestros cinco héroes.
Ese es el concepto de justicia que
solo puede manifestar un terrorista impune, con una amplia hoja de acciones criminales al
servicio de la CIA y quien pretendió pasar por un "pacifista" ante el tribunal,
agregó. Contrasta con ello la posición de otros órganos editados por cubanos, como The
Miami Post, que publicó en su edición del 10 de enero todos los alegatos de nuestros
cinco compatriotas.
Para Reinaldo Taladrid, el juicio fue
una gran conspiración de venganza política, en la cual participaron el FBI, sobre todo
con la persona de Héctor Pesquera, la Fundación Cubano-Americana, los congresistas
"anticubanos", y otros sectores de la extrema derecha del sur de la Florida.
Mencionó cómo en contraste con la
condena sufrida por Gerardo, René, Ramón, Fernando y Tony, los siete individuos de
origen cubano apresados en 1997 por planear un atentado contra Fidel durante la Cumbre
Iberoamericana de Isla Margarita, sorprendentemente fueron absueltos en un escandaloso
fallo, a pesar de la existencia de fuertes indicios que los vinculaban también al
tráfico de drogas.
Uno de esos siete sujetos, explicó,
fue arrestado en enero de 1999 por estar involucrado en un gran caso de contrabando de 365
kilogramos de cocaína, y los propios oficiales de la DEA confirmaron que cuatro meses
antes de ser detenido por el intento de asesinato de Fidel, ya era investigado por su
vínculo con las drogas.
Es decir, esta misma gente que hace
narcotráfico y está asociada con la Fundación, financia a las personas que juzgaron a
nuestros cinco compatriotas, sentenció.
Por vía telefónica desde la
provincia de Río Negro, Claudia Camba, una de las organizadoras del movimiento de
solidaridad con Cuba en Argentina, se refirió a las crecientes muestras de solidaridad de
ese pueblo sudamericano con la justa causa de nuestros patriotas prisioneros del imperio,
sobre todo después de la difusión de sus extraordinarios alegatos.
"Ninguno actuó por dinero. Lo
que hicieron fue por el bien de su Patria y en beneficio del propio pueblo de Estados
Unidos. La verdad se impondrá y los pueblos del mundo tomarán esta batalla como su
bandera. Tienen una fortaleza y una dignidad de gigantes, y eso lo saben apreciar bien las
personas honestas. Ellos van a volver más temprano que tarde", dijo por último
Claudia. |