"El caso violó muchos preceptos de las leyes
norteamericanas", aseveró, y puso como ejemplo la negativa
al cambio de sede de los juicios, con lo cual debió evitarse
que fueran juzgados por personas prejuiciadas desde el
comienzo.
Además, cuestionó las dos cadenas perpetuas
impuestas a Gerardo, por tratar de proteger a su país de los
grupos contrarrevolucionarios radicados en la Florida,
donde, afirmó, existe una probada hostilidad hacia los
intereses de Cuba.
En declaraciones ofrecidas al medio
alternativo The Real News Network, Wilkerson citó un
reciente hallazgo por parte del FBI de un alijo completo de
municiones en el sur de ese estado, que incluía dinamita,
ametralladoras, armas cortas y granadas de cuando la CIA
realizaba entrenamientos en los años 60 para invadir a Cuba.
El coronel Wilkerson también calificó de
atroz la inclusión de Cuba en la lista de Países
Patrocinadores del Terrorismo, cuando Posada Carriles, que
saboteó un avión civil y asesinó a más de 70 cubanos, vive
impune en Miami, dijo.