1 de septiembre del 2006
Vigilar a un
terrorista, misión de Fernando
DEISY FRANCIS MEXIDOR
Francis_mexidor@granma.cip.cu
Estados Unidos anunció a un nuevo oficial de la CIA para
atender los asuntos de Cuba y Venezuela. Dicen en la Casa
Blanca, que el nombramiento de Jack Patrick Maher como
responsable de la "misión" está destinado a recabar y analizar
información de inteligencia en ambas naciones
latinoamericanas.
El
terrorista se ufana de sus crímenes.
Al parecer siguen a pie juntillas lo que manifestó el
presidente George W. Bush después de los atentados del 11 de
septiembre del 2001. Expresó entonces que reforzarían los
servicios de inteligencia de la nación para ayudar a buscar a
los terroristas allí donde se encuentren.
Pero en esta historia hay algo que no encaja, porque si
bien es cierto que para ellos tal nombramiento podría
significar un "reforzamiento" de su aparato de espionaje, lo
hacen contra el blanco equivocado.
¿Cómo Estados Unidos va a buscar terroristas fuera de sus
fronteras, si en su propio territorio acunan y protegen a
varios de los más peligrosos?
BOSCH EL TERRORISTA
Mientras cinco luchadores antiterroristas cumplen
desmesuradas e injustas sanciones en peligrosas penitenciarías
federales norteamericanas por combatir ese flagelo al que la
administración Bush le ha declarado una guerra infinita,
Orlando Bosch Ávila, calificado por las mismas autoridades
estadounidenses como "un extranjero inadmisible (por)
...dedicarse a actividades que serían perjudiciales al interés
público o que pondrían en peligro el bienestar y la seguridad
de los Estados Unidos, relativas al espionaje, el sabotaje y
el desorden público o alguna otra actividad subversiva para la
seguridad nacional", anda libre, sin novedad, dando
entrevistas a distintos medios de prensa en las que enaltece
la violencia.
Así consta en letra diáfana en las confesiones que dio al
diario La Vanguardia, de Barcelona, España, desde el bungalow
donde reside en las afueras de Miami, en las que vindica su
filiación terrorista. "Todo lo habría hecho igual. O el doble.
El doble de lo que hice", afirmó. Se ufana, sin pudor alguno,
de las veces —innumerables— que han organizado el magnicidio
del Presidente cubano, Fidel Castro. Su gran frustración,
según él mismo confiesa al periodista, es no haber podido
cumplir ese objetivo.
Eso explica que el estado de necesidad que impulsó a Cuba a
enviar a territorio estadounidense a hombres como Gerardo
Hernández, Ramón Labañino, René González, Antonio Guerrero y
Fernando González, que infiltraron las organizaciones
terroristas de origen cubano asentadas en el sur de la
Florida, sigue vigente.
LA MISIÓN DE FERNANDO
Precisamente, Fernando, quien cumple condena de 19 años en
la penitenciaría de Oxford, en Wisconsin, tenía entre sus
tareas vigilar y conocer las actividades de ese connotado
criminal. Cooperó en misiones como Arcoiris, que consistía en
filmar reuniones entre Bosch y otros terroristas; Morena, para
tratar de localizar al propio Bosch, que estaba involucrado en
la planificación de actos terroristas..., porque él siempre ha
estado al lado de "la acción, la guerra", como asegurara en su
diálogo con La Vanguardia.
Esos y otros elementos se explicaron en el Amicus
presentado por el Gremio Nacional de Abogados en el 2003, y
antes, durante el amañado juicio de Miami contra los Cinco.
La defensa argumentó el porqué de la labor de Fernando. La
información obtenida por los Cinco sobre las acciones
terroristas, Cuba la compartió también con EE.UU. Existe una
amplia documentación, que incluye textos, fotografías y
grabaciones de cintas, entregada en junio de 1998 a las
autoridades de aquel país, para que pudieran hacer cumplir sus
propias leyes y detener planes criminales.
Como expresara el propio Fernando en su alegato en
diciembre del 2001: "Orlando Bosch vive libremente en esta
comunidad gracias al parole (perdón) otorgado por el ex
presidente George Bush a pesar de ser considerado un peligro y
un connotado terrorista por las propias autoridades del
Departamento de Justicia de este país (...) Orlando Bosch
continúa conspirando (...) para cometer actos terroristas
contra Cuba. Nadie ha ido a arrestarlo". |