Ariel B. Coya

Una a una, continúan apilándose las medallas de las muchachas del judo cubano en la XXVII Universiada Mundial de Kazán, Rusia, y este martes le correspondió a la doble subtitular olímpica Yanet Bermoy (52 kg), quien sumó otra plata a su currículo.

Rumbo a la final, la cienfueguera ganó todos sus combates por la vía rápida.

De ese modo, esta vez la antillana doblegó consecutivamente por ippon a Geldibayeva Jennet, de Turkmenistán, la taipeyana Yu-Jou Su y la alemana Romy Tarangul, antes de ceder únicamente en la discusión del oro frente a la anfitriona Natalia Kuziutina por esa misma vía, según consignó el sitio oficial de la competencia.

Con su presea, la delegación de la Mayor de las Antillas —que asiste solo con cuatro yudocas y dos esgrimistas a la cita multideportiva— arribó a tres medallas, tras el subtítulo recabado el domingo por la monarca de Londres 2012, Idalis Ortiz (+78), y el bronce de Onix Cortés (70) la víspera, válidos para ocupar el sexto escaño en una justa que congrega a 150 atletas de 50 países dentro de la rama femenina.

En la cima del medallero aparece Brasil, que ayer alcanzó su segundo título gracias a la victoria de la medallista de bronce de Beijing 2008, Ketleyn Quadros (57), sobre la ucraniana Shushana Hevondian, tras el oro de Rochele Nunes (+78). Mientras Francia, Sudcorea, Rusia y Hungría, le escoltan con al menos un metal áureo.