Las principales manifestaciones tienen lugar en Sofía y en la
ciudad costera de Varna, en las que se han congregado diez mil y 70
mil personas, respectivamente, según la agencia Bgnes.
Esta jornada de protestas, que coincide con el Día Nacional, da
continuidad a la oleada de manifestaciones que comenzó hace un mes y
que tuvo como detonante los elevados precios de la electricidad, que
obligaron a muchos ciudadanos del país más pobre de Europa a reducir
el consumo en pleno invierno, informa EFE.
"Mafia" y "El oligarca Borisov en la cárcel" son algunas de las
consignas que se han podido oír en la marcha de Sofía, en referencia
a Boiko Borisov, el primer ministro cuyo Ejecutivo dimitió el pasado
21 de febrero ante la presión popular, pero que continuará en el
cargo hasta que se nombre un gobierno interino, antes de que se
celebren las elecciones del 12 de mayo.
Las encuestas sugieren que ni el partido GERB de derecha, al que
pertenece Borisov, ni el partido socialista de la oposición tienen
suficiente apoyo para obtener una mayoría contundente y quienquiera
que gane las elecciones tendrá que formar una coalición para formar
gobierno.
Seis años después de unirse a la Unión Europea, Bulgaria está
rezagada respecto al resto de los miembros. Su sistema de justicia
es objeto de vigilancia especial y está excluido de la zona de
Schengen, que permite la libre circulación sin pasaporte.