El banco español nacionalizado Bankia, salvado de la quiebra tras
recibir una ayuda europea de 18 mil millones de euros en diciembre
pasado, anunció unas pérdidas históricas de 19 mil 193 millones de
euros en el 2012.
Este "agujero" fue fruto de años de financiación frenética de la
burbuja inmobiliaria, cuyo estallido en el 2008, sacudió al sector
financiero español, hasta el punto de llevar a la nacionalización de
varias entidades, entre ellas Bankia, nacida a finales del 2010 de
la fusión de siete cajas de ahorros españolas.