El texto al que el PP ha adelantado su rechazo instaba al
Ministerio del Interior a "dar instrucciones precisas para que se
suspenda inmediatamente el uso de las pelotas de goma" por parte de
las Fuerzas de Seguridad, reemplazándolas por "otros dispositivos
disuasorios menos lesivos" cuyo uso "tenga un potencial menos dañino
y que no pueda en ninguna circunstancia causar graves lesiones e
incluso la muerte de personas".
El secretario primero de la Mesa de la Comisión de Interior,
Federico Cabello, ha sido el encargado de fijar la posición del PP
durante el debate de las proposiciones no de ley del PSOE y la
Izquierda Plural. Ha defendido el uso que hacen los agentes de estos
dispositivos para, según ha dicho, "restituir la seguridad
ciudadana" y permitir el ejercicio del derecho de manifestación. A
su juicio, hoy por hoy no existe ningún otro medio "disuasorio" que
sea más "eficaz" que las pelotas de goma.
Tras subrayar que es "esencial" que quienes utilizan este
material tengan una "formación especializada", Cabello ha dicho
estar convencido de que cuando los agentes las usan lo hacen siempre
de acuerdo al principio de "proporcionalidad" e incluso "con
mesura". Así lo demuestra, desde su punto de vista, el hecho de que
cuando se producen disturbios en manifestaciones el número de
heridos entre los policías suele ser "igual o superior" al que se
registra entre los manifestantes.
Durante su intervención, el socialista Carlos Corcuera ha
mostrado a sus compañeros una pelota y una bala de goma de las que
utilizan los agentes. "No hace falta ser un experto para imaginarse
el daño que puede ocasionar esta pelota", ha dicho.
Corcuera ha exhibido este material antidisturbios, después de
recordar el caso de Esther Quintana, quien perdió un ojo tras
recibir un pelotazo durante la manifestación de la huelga general
del pasado 14 de noviembre en Barcelona, y el de otra manifestante
llamada Consuelo que también fue herida por una pelota de goma
durante los disturbios que se produjeron en la denominada Marcha
Minera de Madrid el pasado mes de julio.
El portavoz del PNV, Emilio Olabarria, ha mostrado su apoyo a la
iniciativa del PSOE, pero ha acusado de "maniqueismo" a los
socialistas por defender ahora que se dejen de usar las pelotas de
goma cuando bajo mandato del PSOE se han producido, según sus
cálculos, una veintena de muertes por su utilización. (Tomado de
Insurgente.org)