Cuba está y se siente en Fukuoka
OSCAR SÁNCHEZ SERRA, enviado especial
FUKUOKA, Japón.— Ya la selección cubana de béisbol que
participará en el III Clásico Mundial entrenó en esta ciudad que
acogerá desde mañana 2 de marzo el Grupo A del magno evento, en el
cual también aparecen inscritos China, Brasil y el elenco anfitrión.
De
derecha a izquierda, Cepeda, Norberto y Yulieski, los tres hombres
CM-3 del equipo Cuba, al finalizar aquí la primera sesión de
entrenamiento.
Mostrando la diferencia entre los dos pulgares, el santiaguero
Alexei Bell expresó que hoy comienza a jugar en el último encuentro
de preparación frente al Soft Bank Hawks de Fukuoka. Dijo sentirse
en forma y afirmó que no tiene imán para los pelotazos, "simplemente
son cosas que pasan en el béisbol". Yadier Pedroso, el lanzador
artemiseño, se siente confiado y listo "para cualquier labor. Si
tengo que hacerlo de relevo, o de abridor contra Japón en esta
primera vuelta, estaré en completa disposición. El compromiso es
gigante, pero no más que el deseo de vencer que tenemos todos".
Desde bien temprano, el director de la plantilla antillana afirmó
que sería Ismel Jiménez el que inicie el primer choque ante el
elenco de Brasil. "Saldré a realizar mi trabajo, estoy muy motivado
con esa misión. No hay un bateador en específico, nosotros nos
cuidaremos desde el primero de Brasil hasta el último de Japón en
esta fase, y en la siguiente serán otros a los que tenemos que
velar".
Espera que con 65 lanzamientos cierre el quinto episodio. "En
busca de tal empeño hay que abrir con strike, el más mínimo
descontrol frustra la tarea".
Alexei
Bell se recupera del pelotazo sufrido en los juegos de preparación.
Todos los jugadores visitaron el Fukuoka Dome y ante la
majestuosidad del estadio, el joven pinero Andy Ibáñez comentó que
"había tenido la posibilidad de jugar en categorías infantiles en
césped sintético, pero siempre impresiona, es un estadio bello". Su
coterráneo, Luis Felipe Rivera, dijo que "no había visto algo así,
pero una cosa es el estadio y otra el adversario, el juego se gana
lo mismo en un estadio grande que en uno pequeño".
Una altísima responsabilidad recae sobre Eriel Sánchez, la de la
receptoría. "Hay mucha cohesión en el grupo, una mentalidad
ganadora, cada uno sabe lo que le toca y cuándo le toca. En lo
personal, me han dado mucha confianza y me empeño minuto a minuto
por responder a ella, y eso se hace en el terreno".
Víctor Mesa nos había expresado antes de llegar aquí que estaba
construyendo, que no debía perder un minuto. Hacérselo perder en un
entrenamiento sería casi un sacrilegio; sin embargo, de receso en
receso, para recoger las bolas bateadas, compartió unos instantes
con Granma, en el terreno del Instituto Tecnológico de
Fukuoka.
"Estamos muy contentos con lo hecho hasta ahora, las cosas han
salido como lo previmos. Llegamos en la forma deportiva que
perseguimos. Pero la mayor satisfacción es ver hoy a estos muchachos
con sed de victoria, es el primer resultado".
¿Cuál sería el otro?
"Ganar".
¿El Clásico?
"Ganar aquí y en Estados Unidos. A eso vinimos, no a otra cosa".
CEPEDA EN LOS MEDIOS JAPONESES
Cepeda es el jugador cubano más promocionado aquí en el prólogo
de la competencia cumbre del béisbol. Varios medios de prensa y la
TV locales hablan de sus dotes ofensivas y de su participación en
los tres Clásicos Mundiales.
Ayer, ante las cámaras y poco después de finalizar el duelo ante
el equipo de Osaka, en esa urbe, el espirituano dijo:
"Creo que nuestro equipo llega en muy buena forma al certamen,
que será muy fuerte en todos los grupos, de manera que ninguno de
los planteles puede cometer el más mínimo error, porque no hay
tiempo para recuperarse".
Sobre cómo lleva ser el hombre de los grandes momentos en el
equipo, el espirituano respondió que "a mí solo me ha tocado el
momento y estoy muy orgulloso de cumplir con la responsabilidad de
responder a la hora buena".
Y añadió: "Pero lo que pensamos todos, no solo Cepeda, es cómo
poder traer la carrera para el equipo, lo mismo con un jit, un toque
o empujando la bola hacia un determinado territorio del campo
adversario".
LOS HOMBRES CM-3
No se trata de un código secreto ni nada por el estilo, pero como
en el mundo las siglas están de moda, Hombres CM-3 significa
peloteros que han jugado los dos Clásicos anteriores y están
inscritos para este.
Cuba tiene a tres jugadores con tal condición. Justamente,
Frederich Cepeda es uno de ellos. El hoy bateador designado pegó
diez imparables en la primera versión en 26 turnos para 385 de
average, con tres dobles, dos jonrones y ocho impulsadas. En la
segunda, lo hizo para 500, de 24-12, con dos tubeyes y tres
cuadrangulares, labor con la cual remolcó a diez.
La cuenta es fácil: 50 veces al bate, 22 jits (average de 444),
cinco dobletes e igual cantidad de cuadrangulares, y 18 empujadas.
Sin duda, uno de los mejores bateadores de estos certámenes e
indiscutiblemente la bujía de Cuba.
Yulieski se fue de 33-9 en el primero que le dio 273, con dos
biangulares y dos vuelacercas, y seis traídas para el home.
En el segundo tuvo balance de 8 en 24 (333), pegó un solo extrabase,
que fue un jonrón e impulsó solo dos.
Mientras Norberto González, el zurdo cienfueguero, lanzó cuatro y
dos tercios en la parada inicial del 2006, soportando dos limpias,
castigo de seis jits y la misma cantidad de ponches que bases, tres.
En el 2009, en tres y dos tercios le marcaron una limpia, ponchó a
cuatro, regaló tres boletos y le pegaron dos incogibles. No ha
tenido decisiones ni juegos salvados en estas citas.
Precisamente a Norberto le preguntamos cuál era la diferencia
para Cuba entre este y los anteriores Clásicos: "Jugar en Asia es la
primera, pero la más importante es la preparación realizada, muy
integral, pendiente a cada detalle. Sin menospreciar lo que habíamos
hecho antes, esta ha sido muy completa en todos los sentidos y el
fruto es la tremenda forma deportiva de cada uno".
EL BÉISBOL ES EMBAJADOR EN JAPÓN
Cruzarse con los citadinos en esta urbe, que mezcla
armoniosamente la arquitectura moderna con las típicas
construcciones japonesas, es motivo de orgullo, pues enseguida viene
la frase Baseball Cuban Team (equipo de pelota de Cuba). Acto
seguido, una reverencia de respeto y una sonrisa de simpatía coronan
las repetidas escenas en las calles de esta ciudad.
En el Fukuoka Dome, que servirá de sede, nos hemos encontrado con
los peloteros japoneses y al vernos con la ropa que identifica a
nuestro país, también hemos experimentado la misma sensación, a
pesar de tratarse de grandes estrellas como Shinnosuke Abe, quien
saludó a un grupo de la prensa cubana en el parque beisbolero.
Por otra parte, el afiche promocional del evento, que puede
encontrarse en cualquier esquina, tiene en el centro, entre varios
jugadores nipones, la imagen del slugger cubano, Alfredo
Despaigne, descargando su poderoso swing de jonrón.
En fin, Cuba se siente y está en Fukuoka con la vista puesta en
la etapa final de San Francisco. Tras ese propósito, la unidad es
una de las grandes fortalezas, y ella tiene varias formas de
expresarse y convertirse en victoria. Sin embargo, Ismel Jiménez la
reflejó en toda su magnitud con una pequeña respuesta a la pregunta
de un periodista japonés en la que le llamaron la figura clave de
Cuba. Él dijo, "aquí hay una sola figura clave, los 28 peloteros que
saldremos al terreno". |