MANAGUA.—
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, tiene la oportunidad
en su segundo período de mandato de dar un paso histórico hacia
América Latina con el levantamiento del bloqueo a Cuba, estimó
Daniel Ortega.
En acto de homenaje al Héroe Nacional, Augusto César Sandino, el
mandatario nicaragüense invitó anoche al jefe de la Casa Blanca a
modificar las relaciones con la región y cumplir el reclamo
internacional de poner fin a las sanciones unilaterales hacia esa
nación caribeña.
Ortega recordó que se trata de un reclamo universal, expresado de
manera reiterada por la Asamblea General de la Organización de las
Naciones Unidas, mediante sucesivas votaciones contra el bloqueo
económico, financiero y comercial impuesto a Cuba por más de 50
años.
Ojalá que en este nuevo período, el presidente Barack Obama de
ese paso histórico, insistió el dirigente frente a miles de personas
reunidas en la capitalina Plaza de la Revolución.
Si Estados Unidos quiere ganarse la simpatía, el aplauso y el
reconocimiento de la América toda y el mundo es suspendiendo de
manera incondicional el bloqueo al hermano pueblo de Cuba, expresó.
Ahí tendríamos a unos Estados Unidos que empezarían a cambiar,
aunque tarde, señaló el estadista, quien llamó a tener en cuenta las
transformaciones en el mundo e incluso en ese país norteño.
Por primera vez se dio la posibilidad de que un norteamericano
afrodescendiente llegara al puesto de presidente, algo imposible en
los tiempos del Ku Klux Klan, cuando personas de ese origen eran
pasadas por llamas, recordó.
No obstante, Ortega consideró que en Estados Unidos hay sectores
que siguen rumiando posiciones derechistas y fundamentalistas.
El también líder del Frente Sandinista de Liberación Nacional
valoró los cambios de correlación de fuerzas en América Latina y el
Caribe a favor de la unidad regional, pese a las diferencias
ideológicas, lo cual atribuyó a la lucha incansable de los pueblos,
con el legado antimperialista y revolucionario de hombres como
Sandino.
En ese sentido, abogó por reforzar la educación y la conciencia
para dar la batalla contra el modelo imperante en el orbe, incapaz
de ofrecer mejor vida para la humanidad y el planeta como lo están
demostrando los hechos con la crisis en Estados Unidos y en la Unión
Europea, cuyos pueblos son los que más sufren las consecuencias.
El dignatario llamó a fortalecer convicciones y creatividad,
conciencia, educación, ciencia e inteligencia para el bien común,
así describió el reto del pueblo nicaragüense, de sus jóvenes en
particular, para seguir construyendo la revolución sandinista.