 La 
			directora del Ballet Nacional de Cuba (BNC), Alicia Alonso, anunció, 
			en La Habana, el ascenso de jóvenes artistas a primeras figuras y 
			bailarines principales de su compañía, de gran reconocimiento 
			internacional.
La 
			directora del Ballet Nacional de Cuba (BNC), Alicia Alonso, anunció, 
			en La Habana, el ascenso de jóvenes artistas a primeras figuras y 
			bailarines principales de su compañía, de gran reconocimiento 
			internacional.
			Para Osiel Gounod llegar a primer bailarín, más que alcanzar un 
			título significa la oportunidad de interpretar papeles con los 
			cuales sueña desde niño, como el duque Albretch, de Giselle, una 
			ilusión aún pendiente.
			El artista distinguido en 2008 con medallas de oro en el Concurso 
			Mundial de China y plata en el de Varna, Bulgaria, aspira a 
			convertirse en un bailarín reconocido internacionalmente.
			Por otra parte, Amaya Rodríguez y José Carlos Lozada igualmente 
			resultaron promovidos a primeras figuras del BNC, y ambos aguardan 
			la posibilidad de desarrollar sus capacidades y consolidar virtudes 
			en obras cimeras del repertorio clásico como Giselle, Don Quijote y 
			La bella durmiente, entre otras. 
			De acuerdo con la dirección de la compañía, Grettel Morejón, 
			Víctor Estévez, Arián Molina y Camilo Ramos obtuvieron el rango de 
			bailarines principales, mientras Ernesto Díaz fue nombrado primer 
			bailarín de carácter, una categoría recién creada para reconocer a 
			artistas sobresalientes en ese estilo.
			A fines de 2011, la más importante revista de Danza en América, 
			Dance Magazine, eligió como bailarines noveles más destacados ese 
			año, a Grettel Morejón y Osiel Gounod, por las escenas del ballet 
			Coppelia que bailaron en varias ciudades de Estados Unidos durante 
			una gira del BNC por ese país.
			Estévez, Molina y Ramos, también cosecharon lauros de estudiantes 
			en diversos concursos internacionales celebrados en La Habana.
			Con la promoción de estos danzantes, la directora del BNC dijo 
			sentirse más joven y, al mismo tiempo, emocionada por el nivel de su 
			escuela.