Los responsables del zoológico de Buenos Aires anunciaron la muerte
de Winner, el último oso polar del recinto, debido a las altas
temperaturas que se viven en la capital del país.
El director de Bienestar Animal de la institución, Miguel Rivolta,
dijo que cuando los veterinarios llegaron a ver a Winner, de 16
años, el oso estaba ya sin vida.
"Las altas temperaturas fueron determinantes", dijo. En los
últimos días se registraron temperaturas récord de hasta 36 grados
centígrados.
"Un animal dormido con calor tiene más probabilidades de morir
porque no puede termorregularse mediante el jadeo o el acceso a una
fuente de agua", añadió.
Los expertos del zoo no descartan además que la pirotecnia
lanzada en Buenos Aires en Nochebuena pudiera haberle provocado un
cuadro de nerviosismo al oso que contribuyera al deterioro de su
salud.