Entrevistado por el diario ecuatoriano El Telégrafo, el
comunicador de 71 años expuso que en el ejercicio democrático
realizado recientemente en la nación suramericana los medios de
comunicación desempeñaron un rol protagónico al pretender alterar la
realidad.
Martínez señaló al rotativo que el candidato de la oposición,
Henrique Capriles, nunca tomó la delantera en la preferencia
electoral y que eso fue un invento de la guerra mediática,
propiciada por los asesores estadounidenses que lo acompañaron.
Así, dijo, invade su mente la injerencia de los Estados Unidos a
través de las Organizaciones No Gubernamentales, las mismas que
financian a quienes tratan de derrocar al presidente Bashar Al-Assad,
en Siria, y que, en otro tono, se usaron para derrocar a Muamar
Gadafi, en Libia.
"Es que ahora el mundo está interconectado vía satélite y las
guerras son globales", aseveró, y apuntó que en toda guerra hay dos
teatros: el real y el que reflejan los medios, que genera la
percepción en los ciudadanos y, en la sumatoria, a la opinión
pública.
"Ahí está la responsabilidad y, a veces, la canallesca
irresponsabilidad de los medios", advirtió.
El también conductor del programa Dossier, del canal multiestatal
suramericano, expuso que Venezuela ha ejercido una política a escala
planetaria que le ha permitido lanzar los satélites Simón Bolívar
(octubre de 2008) y Miranda (septiembre de 2012).
A pesar de las críticas al modelo venezolano difundidas por la
prensa internacional, dijo, para la gente que siempre vio la riqueza
pasando por delante y nunca pudo participar en nada, absolutamente
Venezuela está mejor que nunca.
Ejemplificó que en la República Bolivariana existe el récord de
creación de universidades, todas gratuitas y con las mismas
oportunidades para todos.
Uruguayo de nacimiento y nacionalizado en Venezuela, Martínez se
congratula de haber sido el único periodista que recorrió los cerros
de Caracas, cuando allá no llegaba nunca un médico, ni una
enfermera, ni la Policía, un panorama distinto con el triunfo
bolivariano.
Aseguró que Hugo Chávez es el líder que "rompió el molde de
aquellos presidentes formales, que no quieren subirse de tono por el
qué dirá Washington o la Organización de Estados Americanos".
El periodista alertó que el sueño de la Patria Grande es posible,
pero, acotó, se trata de un desafío hermoso que no estamos en
posibilidad de perder.