El
ministro brasileño de Justicia, José Eduardo Cardozo, afirmó hoy que
el gobierno implementará en breve un paquete de medidas para
combatir la trata de personas, un problema mundial, pero con gran
incidencia en esta nación.
En una audiencia pública, realizada en la Comisión Temporal para
la Modernización de la Ley de Protección al Consumidor, en el
Senado, Cardozo destacó que este es un grave problema que sólo
tendrá solución con las acciones conjuntas de los ministerios e
instituciones.
Mucho se ha hecho para poner freno a esta práctica en Brasil,
pero es necesario avanzar más, ante la gravedad del asunto, indicó.
Según datos oficiales, cerca de 500 brasileños fueron víctimas de
la trata de personas en los últimos seis años. De esa cifra, 337 son
casos de explotación sexual y otros 135 corresponden a casos de
esclavitud.
La mayoría de los afectados proceden de los estados de
Pernambuco, Bahía y Mato Grosso do Sul y tienen como destino países
europeos Suiza, España, Países Bajos y Suiza.
Los Países Bajos aparecen asimismo con 133, el mayor índice de
víctimas brasileñas de la trata de personas, seguido por Suiza con
127 y España (104).
El Secretario Nacional de Justicia, Paul Abraham, resaltó, sin
embargo, que estos datos no son reales, porque las víctimas, en la
mayoría de las ocasiones no quieren o no se reconocen en esta
situación.
Estadísticas del Ministerio de Salud revelan que 80 personas
perjudicadas por la trata de personas acudieron a servicios de salud
en 2011, 30 más que en 2010.
La mayoría fueron mujeres, de entre 10 y los 29 años de edad y
con bajo nivel de educación, muestran las cifras.