Seis
personas, entre ellas una niña de 10 años y una anciana de 80,
murieron el viernes en el sur de España, a raíz de violentas
inundaciones provocadas por las fuertes lluvias que se abatían sobre
el país.
En la localidad murciana de Puerto Lumbreras (sureste) fueron
encontrados "en dos vehículos distintos, un hombre de unos 65 años y
una niña de 10 años que iba acompañada de otras dos personas que se
han salvado", informó a la AFP un portavoz del gobierno de esa
región, la más afectadas por las riadas.
Posteriormente, los servicios de socorro encontraron a otro
hombre, cuya edad se desconocía, quien "se cayó al cauce con su
vehículo" en la localidad de Sagonera La Verde, agregó otro
portavoz.
También en la vecina Andalucía (sur) falleció por la mañana una
anciana de unos 80 años ahogada en la localidad de Álora, informaron
los servicios de emergencia andaluces.
A esta "hay que sumar esta noche el hallazgo de dos personas, un
hombre y una mujer, encontradas en el interior de un vehículo en el
que se pueden haber visto sorprendidos por el agua" en el pueblo
almeriense de Cuevas del Almanzora, cerca de Murcia, añadió una
portavoz del gobierno andaluz.
Cerca de allí, una séptima persona murió en Vera, en la provincia
de Almería, pero no debido directamente a las inundaciones sino a
una cardiopatía agravada probablemente por el estrés, precisó.
Algunas personas se refugiaron en los tejados de sus casas y
cerca de 600 habitantes tuvieron que ser evacuados sólo en
Andalucía, donde las autoridades habían declarado el viernes el
estado de alerta roja por riesgo extremo debido a las lluvias que se
abatían sobre el sur del país.
Las fuertes lluvias provocaron que varios ríos se salieran de sus
cauces causando importantes daños en viviendas, instalaciones
agrícolas y en la red de carreteras.
Las lluvias dejaron imágenes desoladoras: árboles arrancados,
puentes cortados, carreteras derrumbadas y enormes trombas de agua y
barro que corrían con fuerza por los cauces y cubrían calles y
casas.
Armados con grandes palas y equipados de botas de agua, los
empleados de los servicios de emergencia ayudaban a los habitantes a
sacar sus vehículos y limpiar las calles en el pueblo andaluz de
Villanueva del Trabuco.
"En la provincia de Málaga hay 800 efectivos trabajando para
devolver la normalidad lo antes posible. Las lluvias parece que
están aminorando y se desplazan" hacia el este, había precisado la
portavoz andaluza.
Las televisiones españolas mostraban imágenes del sur y el
sureste de España, en que vehículos volcados yacían en las calles
cubiertas de agua y barro.
Una estación meteorológica situada cerca de la localidad de
Antequera, en el centro de Andalucía, registró 217 litros de
precipitaciones por metro cuadrado en 12 horas el viernes, según la
Agencia Estatal de Meteorología.
La alerta roja, que señala un "riesgo extremo", había sido
declarada debido a la lluvia en las costas de Granada y Almería, en
Andalucía oriental. Durante la tarde fue rebajada al nivel inferior,
el naranja, en la zona de Málaga.
Un vuelo que debía aterrizar en Málaga fue desviado al aeropuerto
de Sevilla, más al oeste, temprano por la mañana, "por lluvia",
indicó una portavoz de la agencia gestora de los aeropuertos Aena.
Al menos dos carreteras, la autopista A7 y la nacional 340,
estaban cortadas, así como varias vías comarcales.
Entre las zonas más afectadas por la precipitaciones en la
provincia de Málaga, Alpandeire, al noroeste de Marbella, recibió
245 litros de agua por metro cuadrado en 12 horas el viernes.