Luego de anunciarse los pareos de la primera ronda del magno
evento, Edwin Rodríguez, manager de la escuadra caribeña, reconoció
que su plantilla enfrentará un enorme desafío ante dos potencias del
universo de las bolas y los strikes, aunque aseguró que es un
proceso necesario para probar la calidad de sus pupilos.
"Es un grupo incómodo. Si queremos ganar debemos vencer a esa
gente. Son equipos respetables, pero hay que jugar. Ya en la segunda
ronda, si pasamos, tendremos mayores opciones de llegar hasta la
semifinal", enfatizó Rodríguez a medios puertorriqueños.
Pese a que los boricuas tienen la ventaja del factor campo y en
sus filas se reunirán varias luminarias de las Grandes Ligas, la
mayoría de los especialistas coincide en inclinar la balanza a favor
de la vinotinto y los quisqueyanos, distinguidos por su poder
ofensivo y la fortaleza en el pitcheo.
Sin embargo, la cautela prima ante el soberano reto, más en
Dominicana, donde la prensa muestra su preocupación por los
jugadores convocados y el nivel de compromiso de ellos, sobre todo
de los que no se encuentren en óptima forma deportiva y aún así
acepten ser incluidos en la nómina.
En ese sentido, perturba el precedente de las grises actuaciones
de figuras legendarias como David Ortiz, Adrián Beltré, Albert
Pujols, José Reyes y Alfonso Soriano, quienes rindieron muy por
debajo de las expectativas en las dos ediciones anteriores.
A este detalle debemos sumar que todavía no han definido el
mentor, aunque durante los últimos días trascendió que Moisés Alou,
gerente general del equipo, visitó las instalaciones de los
Yankees de Nueva York, en pos de obtener la autorización para
que Tony Peña, coach de banca de ese equipo, funja como
director dominicano en marzo.
Radicalmente distinto pinta el panorama en Venezuela, donde han
aceptado sin demasiada inquietud su inclusión en el grupo de la
muerte. Carlos Miguel Oropeza, al frente del Comité Organizador del
torneo y gerente de los Cardenales de Lara en la Liga Invernal
morocha, aseveró que solo deben prepararse sin menospreciar a los
rivales.
"No podemos lamentarnos y pensar en qué hubiese pasado de
tocarnos un equipo europeo. Tenemos un compromiso y es llegar a la
final, para eso tenemos que vencer a naciones con un nivel similar
al de nosotros", declaró el directivo.
Por su parte, varios jugadores han manifestado la voluntad de
enfundarse en la casaca venezolana, aunque los federativos del
deporte en ese país aseguraron que solo se han establecido contactos
informales con los peloteros, algunos muy entusiastas por la
posibilidad de contribuir.