Titulada Haciendo el son en otro jazz, la descarga mostró
un repertorio donde se fusionaron el piano y el tres, y sonoridades
diversas como la trova tradicional, el danzón, el chachachá y la
rumba.
La noche de este domingo, en el Iris Jazz Club interpretaron
canciones como Pa’ que aprendas, Cortico y sabroso y
El gallo pinto, a la vez que compartieron el escenario con el
cuarteto de saxofones Magic Sax Quartet, un viejo sueño hecho
realidad, dijo Amat.
Previo a esta presentación, la Sala de Conciertos Dolores acogió
una gala que tuvo de anfitriones al flautista Iván Acosta y su grupo
De Cuba Somos, y a Bobby Carcassés su invitado especial.
Los asistentes escucharon estándares como son My Funny
Valentine, Summertime y Mamá son de la loma, este
último una versión a capella del famoso tema de Miguel Matamoros, a
cargo del llamado showman de Cuba.
El artista estrenó, además, una décima dedicada a esta ciudad, la
que se hizo acompañar de las notas del piano interpretado por él
mismo.
Este evento, iniciado el pasado día 21 de septiembre, se inserta
en el programa promocional que lleva a cabo el Comité Provincial de
la UNEAC en Santiago de Cuba.
Estreno de piezas, realización de una exposición de artes
plásticas y taller teórico, además de promocionar entre los
creadores escenarios como el Iris jazz Club, fueron las novedades de
la cita cultural.
Según el saxofonista César López, presidente de Honor del
festival, el reto está en preservarlo, que artistas de otras
provincias lo conozcan, y fundamentalmente, insertar a los jóvenes
talentos, que son el futuro de la música en la nación.