WASHINGTON.—
Al tiempo que se desenvuelve la actual contienda electoral y los
dólares van de un lado a otro con la sonrisa de Obama o de Romney a
trasluz, crece el desempleo en varias regiones de Estados Unidos
que, casualmente, son consideradas decisivas en la lucha por el
mandamás de la Casa Blanca.
La información fue dada a conocer por el Departamento del
Trabajo, dando por sentado que en 26 estados el problema de la
desocupación alcanzaba mayores dimensiones.
El duelo por el futuro mandatario del país de la McDonald's ha
estado marcado por el lento ritmo del crecimiento económico y el
alto nivel de desempleo.
Por ejemplo, Nevada, considerado fracción significativa de los
comicios, exhibió una tasa de desocupación de 12,1 por ciento,
mientras que Carolina del Norte con 9,7 y Nueva Hampshire con 5,7,
también se unen a los registros más llamativos.
Entretanto, los votos siguen sumándose y los desempleados, más
que decidir entre demócratas y republicanos, sacan su cuenta y la de
sus familias.