Miles
de personas participaron en un servicio en memoria de los mineros
fallecidos en una protesta por mejoras salariales la semana pasada.
La ceremonia tuvo lugar en la mina de platino de Marikana, donde
34 personas perdieron la vida a manos de la policía en un choque
durante la manifestación.
El servicio se vio interrumpido brevemente cuando cientos de
trabajadores en huelga irrumpieron en el lugar, algunos de ellos con
machetes.
Se espera que el presidente Jacob Zuma establezca los términos de
referencia para una investigación sobre el caso. Zuma fue recibido
con frialdad el miércoles, cuando visitó la zona.
La disputa se ha extendido a otras minas del país, que produce
cerca del 75% de todo el platino del mundo.