El embajador de Noruega en la Isla, John Petter Opdahl, dijo que
su país quería ayudar de la manera más rápida y eficiente posible al
pueblo haitiano tras el devastador terremoto del 2010, por eso
decidió colaborar con los médicos cubanos que estaban allí mucho
antes de la catástrofe y conocían el terreno.
Desde entonces, Noruega ha puesto a disposición de Cuba dos
millones y medio de dólares para llevar asistencia sanitaria a los
damnificados.
Opdahl resaltó la eficiencia con que ha trabajado la misión
médica en Haití y aseguró que el proyecto de colaboración es una
inspiración para otros países.
Por su parte, la viceministra cubana de Comercio Exterior e
Inversión Extranjera (MINCEX), Ileana Núñez, destacó la viabilidad
de este tipo de experiencias a tres bandas.
La vicetitular de Salud Pública, Marcia Cobas, afirmó que
especialistas internacionales han validado la utilización de los
fondos para el mejoramiento de las condiciones de salud del pueblo
haitiano.
Tras la rúbrica del documento, el embajador de Haití en la Isla,
Jean Victor Geneus, agradeció los esfuerzos de ambas naciones y su
apoyo a un país asolado por tres catástrofes consecutivas, el
terremoto, las lluvias y el cólera.