WASHINGTON, 3 julio.— Millones de personas en Estados Unidos
cumplen hoy el cuarto día sin electricidad a consecuencia de varias
tormentas en siete estados y esta capital.
Al mismo tiempo, autoridades federales temen que la cifra de 22
muertes aumente debido a una onda de intenso calor.
Trabajadores de las empresas eléctricas restablecieron el
servicio a un millón de clientes, pero casi 1,4 millones de casas y
negocios se mantienen a oscuras, por lo cual carecen de aire
acondicionado, reportó el diario californiano La Opinión.
Las tormentas del viernes, acompañadas de fuertes vientos,
derribaron árboles sobre cables de electricidad en la región
centro-norte y noreste del país, donde también dejaron fuera de
servicio grandes torres de transmisión y subestaciones eléctricas.
Un frente de tormentas se extendió rápidamente por la región y
las autoridades tuvieron poco tiempo para hacer advertencias ante
vientos que fueron tan destructivos como un huracán.
Las empresas eléctricas tuvieron que esperar varios días para la
llegada de personal adicional desde lugares tan distantes como
Québec, Canadá, y Oklahoma, indicó el rotativo.
Muchos vecindarios podrían quedarse sin luz y aire acondicionado
al menos hasta muy entrada la semana, agregó.
Mientras, crece la impaciencia entre las autoridades y la
población.
Esto ocurre una y otra vez, y año tras año, y parece que nunca
están preparados, aseveró John Murphy, conductor profesional de la
ciudad de Burtonsville, Maryland.
También resulta urgente atender a los enfermos y los ancianos,
que son especialmente vulnerables a las altas temperaturas sin aire
acondicionado, muchos de los cuales buscan refugio en hoteles y
sótanos, indicó la publicación.
Las autoridades temen que la cifra actual de 22 muertos pudiera
aumentar debido al calor y al uso generalizado de plantas portátiles
de electricidad, las cuales emiten gases que son peligrosos en
lugares cerrados, concluyó.