Unos 16 territorios gobernados por republicanos amenazaron con no
implementar la llamada cláusula de la expansión en los seguros,
propuesta en la ley certificada por el presidente Barack Obama hace
dos años, informó PL.
Otros siete estados criticaron el programa de la Casa Blanca, que
no entrará en vigor hasta el 2014, e indicaron que tampoco respaldan
los estatutos del nuevo sistema sanitario. De concretarse el boicot,
cerca de 11 millones de ciudadanos quedarán fuera de los auxilios
federales.
La Corte Suprema de Justicia (CSJ) ratificó la semana anterior
gran parte de la reglamentación de la reforma de Obama, pero aclaró
que la Oficina Oval no puede obligar o multar a las gobernaciones en
el caso de la cláusula de la expansión.
Este mandato, prácticamente suspendido por la CSJ, exigía a los
estados incluir en el plan de ayuda a aquellos ciudadanos adultos
con ingresos menores al 133 % del nivel federal de pobreza.
Florida, Ohio, Pennsylvania, Colorado, Missouri, Mississippi,
Nebraska e Indiana son algunos de los departamentos que anunciaron
su rechazo a la expansión.
También Texas, donde la ley hubiera beneficiado a dos millones de
personas, dijo no al programa con el argumento de que le costaría 27
mil millones de dólares en dos años.