El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, afirmó que su gobierno
analiza el pedido de asilo político hecho por el periodista
australiano Julian Assange y consideró extraña la naturaleza de los
cargos imputados a éste.
"Todo el mundo sabe que él es un luchador por la libertad de
expresión sin límites", aseveró Correa en alusión al fundador de
Wikileaks, quien enfrenta un pedido de extradición a Suecia por
presuntos delitos sexuales rechazados por él, reporta Prensa Latina.
El mandatario señaló que Assange se encuentra bajo protección del
Estado ecuatoriano en la misión diplomática de Londres, mientras se
realizan conversaciones al más alto nivel para encontrar una
solución a su requerimiento.
Dijo que Ecuador rechaza la pena de muerte, por lo que no podría
arriesgar a una persona que ha solicitado asilo, más aún por delitos
políticos, a que enfrente esa posibilidad.
No podemos aceptar que haya una persecución política por las
ideas expresadas por Assange, y si ha cometido una infracción legal
en cuanto a los Wikileaks, que se presenten esos cargos, enfatizó.
Argumentó que su país vive un estado de derecho, ama la paz y la
justicia, y no aceptaría que no se haya cumplido el debido proceso
por las ideas políticas de éste ciudadano australiano.
Correa manifestó que su gobierno se tomará el tiempo necesario y
adoptará una decisión en el momento oportuno.
No queremos ofender a nadie, menos a un país como el Reino Unido,
pero no claudicaremos para tomar las decisiones soberanas, apuntó.
Este jueves, Michael Ratner, abogado de Assange, afirmó en una
entrevista con la televisión nacional que su defendido escogió a
Ecuador para solicitar asilo político porque sabía que no puede ser
manipulado por Estados Unidos.
Assange tenía dos opciones, o ser extraditado a Suecia o a
territorio estadounidense, por lo cual debía encontrar un sitio que
pudiera darle la protección y que no fuera manipulado por Estados
Unidos, comentó.
El fundador de Wikileaks teme que una vez en Estocolmo, donde le
acusan de delitos sexuales que él niega, sea extraditado a
territorio estadounidense por delitos políticos y sea condenado a la
pena capital.