RÍO DE JANEIRO, 20 junio.— El presidente Rafael Correa señaló hoy
que Ecuador es un país de libertades, al ser preguntado por la
decisión de su Gobierno respecto a la solicitud de asilo político
hecha por Julian Asssange.
Correa señaló que se está procesando la petición del fundador de
Wikileaks, quien permanece en la misión diplomática de la nación
suramericana en Londres en espera de una respuesta.
Las declaraciones del mandatario coinciden con el comunicado
difundido en Quito de la Embajadora de Ecuador ante el Reino Unido,
Anna Albán, tras reunirse con las autoridades de ese país para
encontrar una solución al caso.
Albán, según el documento publicado por la Cancillería
ecuatoriana, manifestó su satisfacción por el pronunciamiento del
Reino Unido de trabajar con Ecuador a fin de dar una salida a la
petición de Assange.
He dejado en claro que estoy disponible para reunirme con
representantes del Gobierno del Reino Unido en cualquier momento, de
manera que podamos encontrar una solución justa y equitativa a esta
situación, precisó.
La diplomática señaló que no es intención de su Estado de
interferir con los procesos en el Reino Unido o en Suecia, y
describió que fueron cordiales las discusiones con los
representantes de la Oficina de Relaciones Exteriores y de la
Commonwealth.
Remarcó, sin embargo, que la solicitud de Assange será evaluada
por el Ministerio de Relaciones Exteriores de Ecuador y la decisión
tendrá en cuenta la larga y bien establecida tradición de apoyar a
los derechos humanos.
El periodista australiano hizo su pedido de asilo político cinco
días después de que el Tribunal Supremo del Reino Unido rechazara
reabrir su caso y diera luz verde a su extradición a Suecia por
supuestos delitos sexuales.
La máxima instancia judicial británica determinó que el proceso
para la extradición a Suecia dará inicio después del 27 de junio.
WikiLeaks ha divulgado miles de documentos diplomáticos
confidenciales y comprometedores para diversos gobiernos, en
particular para Estados Unidos, los que dan cuenta de la política
hegemónica de ese Imperio.
La cadena de veredictos desfavorables en su proceso hace temer
que una vez en Estocolmo Assange podría ser entregado a la
superpotencia para ser juzgado por traición debido a la divulgación
de esos cables comprometedores