El
secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, inauguró hoy la
Conferencia de Naciones Unidas Río+20 que pretende alcanzar un
acuerdo para detener el deterioro del medioambiente al tiempo que
busca el desarrollo sostenible.
En el centro de convenciones Riocentro, donde tiene lugar la cita
20 años después de la primera de estas reuniones cimeras, alertó
sobre los peligros que se ciernen sobre el planeta en materia
ambiental.
Subrayó que los países tienen una segunda oportunidad para
impulsar el desarrollo sostenible.
El mundo está "a contrarreloj", "veinte años después, tenemos
otra oportunidad. No la desperdiciemos", exhortó Ban Ki-moon.
Por otra parte, felicitó a las delegaciones presentes en el
encuentro por la aprobación del documento final de la Conferencia.
Consideró que se trata de un "acuerdo histórico" en el que
convergieron 193 países.
En la primera sesión de la cita, que se extenderá hasta el
próximo viernes, el secretario general de Naciones Unidas designó a
la jefa de Estado brasileña, Dilma Rousseff, como presidenta de la
conferencia.
También, al ministro de Relaciones Exteriores de Brasil, Antonio
Patriota, como su vicepresidente.
Río+20 conmemora los 20 años de la primera de estas cumbres
mundiales que estableció una agenda global para el desarrollo
sostenible.
En aquella ocasión fueron aprobados el Convenio sobre la
diversidad biológica, la Declaración sobre los bosques y masas
forestales y el Convenio Marco sobre el Cambio climático.
Para organizaciones civiles, no gubernamentales, políticos,
académicos, mujeres, religiosos, representados en la Cumbre de los
Pueblos que se celebra de forma paralela a la Conferencia de la ONU,
esos temas siguen pendientes, advirtió Prensa Latina.