LOS
CABOS, 19 de junio.— Las agencias de Naciones Unidas FAO, FIDA y PMA
hicieron este martes un llamamiento para que los líderes del G-20,
reunidos en México, concentren sus esfuerzos en la lucha contra el
hambre, al tiempo que representantes de organizaciones no
gubernamentales (ONG) les exigieron poner mayor atención en el
desarrollo.
En una nota, la Organización de Naciones Unidas para la
Alimentación y la Agricultura (FAO), el Fondo Internacional para el
Desarrollo Agrícola (FIDA) y el Programa Mundial de Alimentos (PMA)
recuerdan a los líderes del G-20 que tengan presente en sus
reuniones que "alrededor de 900 millones de mujeres y hombres están
malnutridos y la mayoría están en África y Asia", durante el segundo
y último día de trabajo de la VII Cumbre del Grupo en el puerto
turístico mexicano de Los Cabos.
También, la Organización Internacional del Trabajo (OIT)
transmitió un mensaje sobre la necesidad de restaurar la confianza
en los mercados de trabajo con la creación de empleos, especialmente
para los jóvenes, agrega PL.
Su director general, Juan Somavía, afirmó que en estos momentos
extremadamente inciertos, cuando cientos de millones de personas ven
desvanecerse sus aspiraciones de empleo y trabajo decente, los
líderes del bloque deben escuchar y actuar.
Recordó que unos 84 millones de personas están sin trabajo en los
países del G-20, incluyendo 37 millones de jóvenes, y que, solamente
en la Unión Europea, más de 24 millones no consiguen ocupación.
Por su parte, representantes de las ONG dijeron que las naciones
en desarrollo están haciendo su parte al aportar dinero al Fondo
Monetario Internacional (FMI) para crear barreras de protección
financiera alrededor de Europa, que sufre una crisis financiera.
"Esperamos que esto se traduzca en una democratización de las
instituciones financieras internacionales, y en una movilización de
recursos hacia una agenda de desarrollo", dijo Carlos Zarco, vocero
de la oficina mexicana de Oxfam, organización a favor de la
seguridad alimentaria.
El lunes, el FMI indicó en un comunicado que había recibido la
promesa de 12 países, en su mayoría emergentes, de aportar 456 mil
millones de dólares adicionales para un fondo internacional que
enfrente la crisis en Europa.
"Es particularmente irónico tener al mundo en desarrollo en el
papel de rescatadores de Europa, muestra un cambio del poder
financiero mundial", señaló por su parte Eric Farnsworth,
investigador de la ONG Consejo de las Américas. (SE)