Al menos ocho soldados turcos y 10 milicianos del independentista
Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) murieron hoy en
enfrentamientos en la provincia de Hakkari, en el sureste de
Turquía.
Los insurgentes kurdos penetraron por el paso fronterizo de
Daglica desde la vecina Irak y sorprendieron a los militares turcos
en tres puntos distintos de la zona, según informó el diario
Hurriyet en su versión digital.
Además de las bajas fatales, los combates dejaron unos 16 heridos
del lado turco.
El PKK es un partido ilegalizado que se fundó en Turquía en 1978.
Considerado terrorista por Ankara, esta formación política procura
la creación de un Estado soberano para los kurdos, etnia que vive en
la región histórica de Kurdistán, detalló Prensa Latina.
Este partido comenzó la lucha armada contra el gobierno otomano
el 15 de agosto de 1984, como parte de un conflicto que desde esa
fecha ha costado la vida a más de 45 mil personas, según estimados.
"Este tipo de incidentes ha ocurrido antes en la lucha contra el
PKK y aunque esta no es la primera vez, tampoco será la última",
dijo en relación con los choques armados el viceprimer ministro
turco, Bulent Arinc.
Según el funcionario, las tropas de Ankara enfrentaron el combate
en inferioridad de número y armas.
Durante el ataque, el Ejército turco empleó armamento pesado
contra los insurgentes y provocó una decena de muertes en las filas
kurdas, tras recibir refuerzos inmediatos en la zona donde todavía
prosiguen los combates, de acuerdo con la versión oficial.