Posicionada estratégicamente en el centro del país, la papelera
espirituana, junto a Damují, de la vecina Cienfuegos, aporta linner
y cartoncillo a las fábricas de cajas de La Habana y Santiago de
Cuba (se cubre alrededor del 60 % de la demanda nacional) y todo el
papel requerido por el Ministerio de Salud Pública en los procesos
de esterilización.
Según detalló Eduardo Rodríguez Verdura, director de la Unidad
Empresarial de Base (UEB) Pulpa Cuba, los trabajos que actualmente
se ejecutan incluyen cambios en el sistema de bombeo desde la
represa y de alimentación de agua a las calderas, así como la
instalación de dos modernos compresores de aire y de una motobomba
diésel para casos de posibles incendios en la industria trinitaria.
A ello se suman los quehaceres, ya concluidos, que permitieron
independizar el sistema eléctrico para el bombeo de agua al batey
conocido como FNTA y otras comunidades aledañas a la industria, una
carga que durante años gravitó sobre los costos de las producciones
de Pulpa Cuba.
Durante el 2012 también se prepara un proyecto técnico con vistas
a sustituir, el próximo año, alrededor de un kilómetro de la
conductora que se extiende desde el río Ay hasta la planta,
actualmente en muy mal estado.