Las contradicciones maestros-Ministerio de Educación de Panamá
siguen creciendo; mientras la titular Lucy Molinar ratifica que no
se dejará chantajear, el gremialista Luis López asegura que el paro
de una hora diaria se mantiene.
Prefiero renunciar a caer en ese juego odioso, dijo enfática
Molinar como respuesta a la medida de no dar clases por una hora
adoptada por la dirigencia magisterial como ultimátum para que
reanude las mesas del diálogo.
López, líder del Frente de Educadores Independientes y miembro de
la Coordinadora de Unidad Magisterial, explicó que la huelga fue
aplicada en la mayoría de las escuelas oficiales y algunos docentes
prefirieron parar antes de terminar su jornada.
Señaló que esa suspensión la mantendrán hasta que se reanude el
diálogo, y si no hay respuestas, la medida puede ser por más tiempo.
Molinar reiteró que respeta la libertad, pero que la prioridad en
el sistema educativo son los estudiantes y por ellos se tiene que
hacer todo, puesto que se tienen años de retrasos.
Denunció que detrás de esa acción hay mucho más, ya que se ha
conversado con los maestros y se les ha manifestado que después que
salga de todos sus compromisos, que terminan el próximo lunes 25,
está dispuesta a sentarse en las mesas del diálogo.
Según reporte de Prensa Latina, López replica que mantienen su
propuesta de sentarse otra vez a negociar, siempre y cuando sea
sostenible y en un lugar accesible para todos.
En una tercera posición, Aixa Gómez, de la Confederación de
Padres y Madres de Familia, expresó que no todos los docentes
piensan igual, por lo que le solicitó al ministerio que tome las
medidas necesarias, pero que se siente a negociar.