Después
de un mes y medio sin la menor indicación de que investiga
seriamente el caso, el Buró Federal de Investigaciones (FBI) acaba
de entregar a la prensa local fotos borrosas de un vehículo
sospechoso, tomadas por una cámara de seguridad en las proximidades
de la agencia de viajes a Cuba, Airline Brokers Co., la noche de su
destrucción por un incendio terrorista.
El FBI señala como "vehículo de interés", lo que aparece en las
imágenes y que pudiera ser una camioneta o un automóvil hatchback.
Los investigadores no explican más allá su hipótesis acerca de lo
que pudiera ser el carro de los terroristas y cómo el vehículo
hubiera podido encontrarse ahí en medio del incendio criminal.
Cuando las agencias de Inteligencia norteamericanas pretenden
poder fotografiar una chapa de carro desde sus satélites, las
imágenes del FBI se caracterizan por una calidad tan mala que uno
pudiera pensar que son solo una cortina de humo para simular que una
investigación está realmente en curso.
Por su parte, Vivian Mannerud, la dueña de Airline Brokers Co.,
no pierde esperanza en cuanto a una eventual identificación de los
autores del crimen. Ella incluso pidió a los terroristas que se
entreguen antes de ser arrestados.
El incendio que dejó hechas cenizas las oficinas de la agencia de
viajes a Cuba, ocurrió el 27 de abril en un inmueble del 815 Ponce
de Leon Boulevard, en Coral Gables, un municipio de Miami.
El breve comunicado del FBI pide la colaboración de la comunidad
para identificar el "vehículo de interés" pero no ofrece detalle
alguno sobre el avance de la investigación.
Alrededor de las 3:30 a.m. el auto aparece transitando una de las
calles laterales cerca de la agencia de viajes.
Las autoridades solicitan a aquellos que tengan información sobre
el caso que llamen a los números del FBI, ATF, Departamento de
Bomberos de Coral Gables y Departamento de Bomberos e Investigación
de Incendios de la Florida.
Con tantos informantes, colaboradores, agentes, chismosos y
cámaras de las buenas de que dispone el FBI, la policía de Miami y
la CIA en los círculos terroristas que todos han contribuido a
crear, parece incomprensible que no se haya detenido ya a algunos
sospechosos en relación con este crimen.
A través de las cinco últimas décadas, los investigadores de todo
tipo que se manifiestan en Miami, siempre han tenido relaciones con
la mafia terrorista, que consideran como una parte integral de su
mecanismo de agresión contra Cuba y los sectores progresistas de
América Latina.