SANTIAGO DE CHILE, 10 junio.— La policía de Carabineros de Chile
reprimió hoy aquí con carros lanza agua una manifestación popular
contra el homenaje organizado por la ultraderecha en evocación del
exdictador Augusto Pinochet (1973-1990).
Lorena Pizarro, presidenta de la Agrupación de Familiares de
Detenidos Desaparecidos (AFDD), denunció la arremetida policial
contra los manifestantes, cuando intentaron acercarse al teatro
Caupolicán.
En ese recinto el Círculo de Militares en Retiro y la Corporación
11 de Septiembre, que reivindica con su nombre el golpe de Estado de
1973, planificaron la exhibición del documental Pinochet.
Pretenden "limitar nuestro paso para que el homenaje al dictador
se pueda hacer con los recursos de todos los chilenos", afirmó la
dirigente de los DD.HH, quien encabezó la acción de protesta.
Por su parte la vicepresidenta de la AFDD, Mireya García,
denunció el amplio despliegue policial para proteger a los
exuniformados y ultraderechistas asistentes al acto, cuando el
gobierno dijo no favorecer ese homenaje.
Asimismo vecinos de la calle San Diego, donde se encuentra el
teatro, señalaron que se les impide pasar a sus hogares y sólo se
deja acceder a las calles aledañas al Caupolicán a los invitados al
criticado espectáculo.
Este domingo el Premio Nobel de la Paz 1980, el argentino Adolfo
Pérez Esquivel, volvió a lamentar que el gobierno chileno no
impidiera la realización del tributo a Pinochet.
A través de una carta enviada al presidente Sebastián Piñera,
Pérez Esquivel recordó que el 11 de septiembre de 1973 inauguró en
Chile momentos de oscurantismo y dolor con un alto costo en vidas
humanas.
El golpe de Estado de Pinochet fue un acto de traición y
violencia para derrocar un gobierno democrático elegido por y para
el pueblo chileno, e implantar un Estado de terror, enfatizó.
El Nobel de la Paz subrayó también la complicidad de los Estados
Unidos en la gestación del golpe de Estado contra el gobierno
legítimo de Salvador Allende (1970-1973).