El siempre deseado contacto entre los pueblos de Cuba y China se
hace este viernes realidad con la presencia en la ciudad de Beijing
del Ballet Nacional de la isla (BNC), que mañana inaugurará el
Festival de las Artes de Beijing.
Cuatro funciones consecutivas en el Gran Teatro Nacional
acercarán nuevamente al público chino a la escuela cubana de este
arte como expresión de una cultura promotora de amistad. El mensaje
llegará esta vez con una obra clásica, El lago de los cisnes,
reporta Prensa Latina.
El BNC es bien conocido en esta nación, que lo recibió en enero
de 1961, solo meses después del establecimiento de relaciones
diplomáticas entre La Habana y Beijing. Entonces el primer ministro
Zhou Enlai estuvo entre sus espectadores.
Luego regresó en diciembre de 1964, cuando fue saludado por el
líder chino, Mao Zedong, quien saludó personalmente a los artistas.
De tiempos más recientes se recuerdan sus visitas en 2002,
ocasión en que animó el mencionado festival, y en 2004.
Con programas también en las urbes de Shanghai y Guangzhou,
capital de la provincia de Guangdong, esta nueva presencia del
ballet cubano aquí responde a reiteradas solicitudes.
A esos antecedentes se suman el virtuosismo y triunfos en los
mejores escenarios internacionales de la compañía que dirige Alicia
Alonso, los cuales también se conocen en este país.
Por ello más que sorprender, el BNC solo reafirmará su bien
ganado prestigio.
Si algo puede llamar la atención es la presencia de figuras
jóvenes en un elenco que a pesar de la renovación, mantiene su
indiscutible calidad.
Esa credencial la llevarán al escenario figuras como Viengsay
Valdés, Anette Delgado y Sadaise Arencibia, junto con sus compañeros
Dani Hernández, Yanier Gómez, Arián Molina, Osiel Gounod y Víctor
Estévez, todos en los roles protagónicos.
Como la distancia geográfica deviene obstáculo en el intercambio
cultural, las ocho funciones del ballet en esta gira devendrán
oportunidades para vencerla y enriquecer los vínculos con el pueblo
chino, a quien el BNC vino a ofrecer su ballet como amistad, según
adelantó Viengsay a Prensa Latina al llegar a esta capital el pasado
miércoles.
Y todo para que visitantes y anfitriones puedan tener un lindo
recuerdo de estos encuentros, como dijo Anette.