BAGDAD,
19 de abril.— La nueva cadena de atentados que azotó este jueves
Iraq causó al menos 42 muertos y volvió a poner en evidencia la
frágil situación de la seguridad nacional, trayendo consigo la
realidad de que en el país continúa en caos.
Las autoridades dijeron que en total los extremistas perpetraron
diez ataques en Bagdad y en tres ciudades del norte iraquí; Kirkuk,
Dibis y Taji. Además, se dispararon morteros en las ciudades
norteñas de Beiji y Tikrit, la ciudad natal de Saddam Hussein,
aunque no se reportaron heridos, según AP.