El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, afirmó este martes que
el cantón (municipio) de El Pangui, donde está el proyecto minero El
Mirador, será uno de los más prósperos del país, al igual que la
provincia de Zamora Chinchipe a que pertenece.
Ese territorio amazónico, subrayó en entrevista con varias
radiemisoras de Imbabura, pasará de ser la décimo novena a la quinta
entre las 24 economías provinciales, reporta Prensa Latina.
Además, enfatizó, al ser la provincia con menos habitantes su
nivel per cápita será muy alto, y lo que tenemos que empezar a
discutir es cómo evitar la migración, la colonización, el desorden
urbano, porque esos son los problemas a enfrentar con la prosperidad
que tendrá.
La nueva Ley de Minería ordena que al menos el 60 por ciento de
las utilidades mineras queden para el desarrollo territorial donde
está el producto minero, explicó el mandatario.
También, agregó, la ley establece que el 12 por ciento de las
utilidades de los recursos naturales no renovables que corresponden
al Estado vayan al desarrollo local, y el gobierno se compromete a
que ni un dólar salga de El Pangui y de Zamora Chinchipe hasta haber
eliminado la pobreza.
Durante una entrevista concedida a Radio Activa, Armonía y UTV
(Televisora Universitaria), Correa afirmó que la principal causa de
contaminación del agua potable en el país no es la minería, sino las
aguas servidas que carecen de tratamiento.
Esto (las plantas de tratamiento) se soluciona con cientos de
millones de dólares que precisamente van a salir de la minería,
aseveró el mandatario, tras ratificar que es la propia minería quien
puede ayudar a recuperar el agua.
El jefe de Estado aclaró que toda acción del ser humano posee su
impacto ambiental y, a su vez, la minería no está exenta de esto,
pues hasta vivir en una ciudad tiene impacto a la naturaleza.
Debemos ser coherentes, minimizar dicho impacto y aprovechar el
costo-beneficio. Es necesaria la minería, pero podemos y debemos
hacerla con responsabilidad social, resaltó.
Pocas veces ha habido medida más profunda de un gobierno para
mejorar la calidad ambiental nacional, como la mejora de los
combustibles y al mismo precio, aseveró Correa, al referirse a las
gasolinas que tenían el más bajo octanaje de América Latina.