El cabecilla de una banda armada que operaba en la provincia de
Aleppo, identificado como Yasser Fouzi al-Abd, confesó ante la
televisión siria la comisión de varios delitos, entre estos
asesinatos, así como su vinculación con la red terrorista al-Qaeda.
Entre los homicidios en los que participó estuvieron las muertes
de los hombres de negocio Mahmoud Ramadan y Mahmoud al-Sourani, y
describió cómo al-Qaeda articuló una red de miembros en esa
noroccidental comarca de Siria fronteriza con Turquía.
Al-Abd se describió como salafista -seguidor del salafismo, una
interpretación fundamentalista del Islam- y que se unió a Mohannad
Jafala quien compartía sus ideas e incluso estuvo como 'jihadista'
en la ciudad de Tikrit, Irak, durante la guerra en ese país árabe.
Confesó que se relacionó con Jihad Albo Assi a quien identificó
como miembro de al-Qaeda, a quien suministro dos escopetas de
cartuchos, y este le dijo que estaban preparando algo grande en
Aleppo.
Relató que Assi le entregó una lista de materiales que
necesitaban conseguir y le explicó que eran para elaborar los
explosivos que usa al-Qaeda en sus atentados.
El viernes 10 de febrero dos potentes ataques terroristas con
coches bomba estremecieron la ciudad de Aleppo y ocasionaron 46
muertos y 235 heridos, reflejó Prensa Latina.
Al-Abd reveló que Assi le dijo que habían articulado una red con
un cabecilla en cada poblado de la provincia de Aleppo.
Al jefe máximo lo llamaban Hajji que es un rango religioso, y
algunos de ellos habían operado como jihadistas en Afganistán, como
el hajji en la localidad de Maria, según contó.
El hajji en el pueblo de Indan a quien identificó como Abdul-Aziz
Salama, era el jefe general de la red en la zona rural de Aleppo y
recibía órdenes directas de al-Qaeda, reveló.
Relató cómo con Jafala y otras tres personas formaron un grupo al
que llamaron 'Batallón Abu Amara' y quemaron vehículos que
pertenecían a partidarios del gobierno, robaron y saquearon
comercios para conseguir fondos con los que alquilaron una vivienda
que les sirviera de centro de operaciones.
Agregó que robaron vehículos los cuales llevaban al pueblo de
Dabiq donde un individuo que identificó como Abu Ali les cambiaba el
color y las matrículas y obtenían los explosivos de otro a quien
llamó Huzayfa Jandouri, un experto en bombas artesanales.
Reveló que crearon una página en Facebook en la cual informaban
sobre sus acciones.
El terrorista relató que asesinaron a Mahmoud Ramadan por encargo
del llamado Consejo de Estambul lo cual hicieron por dinero, y se
sorprendió al conocer que era hermano de Ahmad Ramadan, uno de los
miembros de esa organización de la oposición siria en el exterior,
que les pidió que borraran tal ataque de su 'blog' en Facebook
porque ellos tenían otros planes.
Posteriormente, añadió, esa agrupación fundada en Estambul con el
nombre de Consejo Nacional Sirio, eñl cual pide la intervención
armada contra este país, emitió un comunicado en el cual Ahmad
Ramadan acusó a las fuerzas de seguridad de la muerte de su hermano
Mahmoud.
Al-Abd confesó que el Consejo de Estambul les pagó a una cuenta
que abrieron en Turquía y con ese dinero financiaban sus actividades
terroristas.