Al menos cinco policías perecieron, tras un atentado perpetrado
por una suicida en un puesto de control en la república rusa de
Daguestán, en el Cáucaso Norte, informó hoy el ministerio del
Interior.
Con una potencia equivalente a dos kilogramos de trilita, la
detonación también provocó heridas a otros dos agentes del orden
público, apostados en la salida de la aldea de Karabudajkent, en la
provincia daguestana del mismo nombre.
Al parecer, la carga explosiva colocada en el cuerpo de la
suicida estaba reforzada con pequeños metales y otros objetos
contundentes que aumentaron el efecto destructor de la bomba,
señalan expertos.
De acuerdo con los primeros datos policiales, la agresora era
viuda de uno de los dirigentes de grupos subversivos, eliminados en
operaciones especiales realizadas en las últimas semanas en
Daguestán, con saldo de más de una decena de muertos entre las
tropas especiales.
La fiscalía abrió causa judicial por atentado contra la vida de
miembros de los órganos del orden público, tráfico ilegal de
explosivos, preparación ilegal de bombas y daño premeditado de
propiedad ajena, reportó Prensa Latina.