Como ya se ha hecho costumbre, las alumnas de Mayelín Causse
salieron a la cancha en busca de sacar ventaja en cualquier acción
de juego por mínima que esta fuera, poniendo en aprietos al
contrario y recurriendo a esa imaginación que las ha convertido en
una escuadra incómoda y muy difícil de derrotar. De modo que
manteniendo su concentración como visitantes en terreno pinareño y
provocando estrés en la tropa anfitriona, ganaron sin contratiempos
el play off por el oro con dos cómodos triunfos de 91-69 y 105-78.
Para conquistar su bicampeonato las indómitas siguieron apostando
a una efectiva defensa, fruto de esa excelente comunicación que
existe entre todas sus piezas, y en el baloncesto la clave es
transmitir, que las jugadoras conozcan que no están solas.
Un factor importante en la fluidez del juego de Santiago ha sido
el papel catalizador que ha asumido la defensa organizadora Isneidis
Casanova, quien con su estilo, velocidad, dinamismo y coraje se
convirtió en la brújula del conjunto tras anotar 89 puntos (líder)
en la final.