Siria condenó hoy la serie de ataques con bombas que causó al
menos 32 muertos y decenas de heridos en Bagdad y otros sitios de la
vecina Irak, dio a conocer Prensa Latina.
En total ocurrieron nueve atentados dinamiteros al amanecer y el
más sangriento tuvo lugar en el distrito predominantemente shiita de
Al-Kazimiya, donde murieron nueve personas en el instante y se
registraron lesionadas otras 24. También se perpetraron ataques en
otras ciudades.
En una declaración de su cartera del Exterior, la administración
siria ofrece profundas condolencias al pueblo y gobierno iraquíes,
así como en particular a los familiares de las víctimas.
Desde que el viceprimer ministro iraquí, de credo sunita, fue
acusado de complotar contra el máximo líder del país, seguidor del
shiismo, el mes pasado, han venido aconteciendo hechos de este tipo,
lo cual apunta a un repunte de la violencia sectarista.