Al menos 15 islamistas supuestamente vinculados a Al-Qaeda
murieron durante varios ataques con aviones no tripulados en el sur
de Yemen, mientras otras acciones militares amenazan hoy con abortar
el controvertido proceso de transición nacional.
Fuentes del Ejército yemenita y residentes en la sureña provincia
de Abyan indicaron que tres aparatos estadounidenses del tipo drone
atacaron anoche a milicianos islamistas radicales a los que el
Gobierno relaciona con Al-Qaeda en la Península Arábiga (AQPA).
Testigos afirmaron que al menos cuatro de los irregulares
fallecidos eran líderes de esa red, que tomó el control de las
ciudades de Zinjíbar, Jaar y Lawdar, todas en Abyan, desde mayo de
2011 y ha resistido múltiples intentos de las fuerzas armadas por
desalojarla.
Aunque las tropas gubernamentales han sufrido numerosas bajas en
las acciones para expulsar a los islamistas de Abyan, la pasada
madrugada lanzó, con ayuda de aviones estadounidenses, ataques
contra dos carros que transportaban personal por el oriente de
Lawdar.
Miembros de tribus de la localidad negaron esa versión y
aseguraron que el asalto letal se produjo a medianoche contra un
puesto de control y una escuela donde se realizaba una reunión de
jefes locales de AQPA, los cuales fueron abatidos en cuatro
incursiones consecutivas.
Las operaciones de la aviación del Pentágono ocurrieron mientras
el presidente yemenita, Alí Abdulah Saleh, se encuentra en Estados
Unidos para tratamiento médico, en un viaje que círculos políticos
valoraron como destinado a alejarlo de la turbulencia política
nacional.
Muchos opositores acusaron al mandatario de utilizar el tema de
AQPA como pretexto para aferrarse en el poder con respaldo de la
Casa Blanca, dada la prioridad que Washington concede a la llamada
lucha internacional contra el terrorismo.
Por otro lado, medios noticiosos reportaron que la Guardia
Republicana, afín a Saleh, irrespetó un acuerdo para desmilitarizar
las principales ciudades y volvió a desplegar carros de combate en
la sureña provincia de Taiz, escenario de masivas protestas
populares.
Además, ese cuerpo armado retiró a sus representantes de la
Comisión Militar creada por el vicepresidente y mandatario en
funciones, Abdo Rabbo Mansour Hadi, como parte del proceso de
transición que incluyó un gobierno de unidad hasta las elecciones
fijadas para el 21 de febrero.
La decisión de la Guardia Republicana se conoció en medio de un
ambiente de terror en la localidad de Al-Dabi, luego que ayer se
escucharon seis explosiones provocadas por disparos de lanzacohetes
contra campamentos militares en Al-Abboud y Al-Jeraba.
Junto con esas bases pertenecientes a la Brigada 35 del Ejército,
se registraron acciones de insubordinación en el aeródromo de Al
Anad, donde ingenieros suspendieron los vuelos militares en
solidaridad con una protesta de sus colegas en Sanaa, indicó Prensa
Latina.