Tanto una acción bélica como sanciones unilaterales contra Irán,
serán vistas por la comunidad internacional como un intento de
forzar un cambio de gobierno en ese país, declaró hoy el
viceministro ruso del Exterior Guennadi Gatilov.
En los últimos tiempos, se observa una tendencia de agudización
de las tensiones en torno a Irán, declaró el diplomático ruso.
La aplicación por los estados occidentales de más restricciones a
Teherán, por encima de lo estipulado en resoluciones del Consejo de
Seguridad de la ONU, ejerce un efecto negativo en la población y en
la economía del país persa, señaló Gatilov en conferencia de prensa.
Tal línea de conducta sabotea los esfuerzos de la comunidad
internacional por buscar una salida negociada al diferendo en torno
al programa nuclear iraní, afirmó.
Con las limitaciones a la venta de armas a Irán, contenidas en
una resolución del mencionado Consejo, se agotaron las medidas
punitivas de influencia sobre ese estado, estimó el funcionario.
Otra sanción unilateral por encima del referido documento nada
tendrá que ver con el régimen de proliferación nuclear, aseguró.
Moscú se pronuncia por una salida negociada del diferendo en
torno al programa nuclear de la nación persa, que defiende su
derecho a producir combustible para sus plantas atómicas, un de las
cuales fue construida con la colaboración rusa e inaugurada el
pasado verano.
La tensión aumentó en el Golfo Pérsico, después que en respuesta
a un posible embargo de la Unión Europea al petróleo iraní a finales
de este mes, Teherán respondió con amenazas de bloquear con su
Armada el Golfo de Ormuz, por donde pasa el 40 por ciento del crudo
en el orbe, informó PL.